El expresidente del Gobierno de España ha recibido la distinción con emoción y agradecimiento, acompañado por su familia, viejos amigos y autoridades.
La catedrática de Derecho de la Universidad de León (ULE) Esther Seijas Villadangos ha pronunciado en la mañana de ayer lunes un bonito discurso laudatorio en el que ha hecho un recorrido por los méritos que adornan la figura de José Luis Rodríguez Zapatero, el expresidente del Gobierno de España que hoy ha sido investido Doctor Honoris Causa por la universidad en la que estudió, en la que impartió clases de Derecho Constitucional hace ya muchos años, y a la que hoy ha regresado, emocionado y agradecido, para recibir la máxima distinción, en su condición de ‘leonés nacido en Valladolid’, que así es como le ha definido su madrina, la profesora Seijas Villadangos.
La jornada ha comenzado con un encuentro con los medios de comunicación, que ha servido para que Zapatero declarase que el reconocimiento brindado por la ULE es una de las páginas que “íntimamente más satisfacción me producen en mi biografía política y personal”.
El expresidente ha dicho que su lealtad con la institución académica es “intensa y para siempre”, y ha prometido apoyarla en “todo lo que sea preciso”.
“Un país es lo que son sus universidades, -ha afirmado-, si trabajan, investigan y se proyectan internacionalmente, ese país tiene garantizado su futuro, y eso es lo que hace la Universidad de León”.
Autoridades, amigos, familiares y exministros de Zapatero
Ya en el Aula Magna San Isidoro, el nuevo Doctor Honoris Causa de la ULE, que hace el número 54 del cuadro de honor, se ha visto acompañado por una amplia representación de autoridades locales y provinciales, como el alcalde de León, José Antonío Díez, la de San Andrés del Rabanedo, Camino Cabañas, el de Gordoncilo, Urbano Seco, y un largo etcétera de regidores municipales.
También hicieron acto de presencia la Delegada del Gobierno, Virginia Barcones, el Subdelegado, Faustino Sánchez Sanmartino, el Procurador del Común, Tomás Quintana, el Presidente de la Diputación, Eduardo Morán, el Presidente del Consejo de Cuentas de CyL, Mario Amilivia, políticos en activo como Luis Tudanca, y otros que lo fueron en tareas de gobierno con Zapatero, como José Blanco López o Miguel Sebastián. También se han visto caras conocidas, como el exsecretario general de UGT, Cándido Méndez, y familiares y amigos que no han querido perderse la ceremonia.
Cuando ha tomado la palabra, Zapatero ha iniciado su intervención con agradecimientos para todos los que, empezando por el Rector, han hecho posible la concesión del Honoris Causa, así como para quienes han trabajado a su lado y especialmente a su familia, sus hijas y Sonsoles. «Nos encontramos hace ya 40 años, -ha dicho-, y ese encuentro ha sido el hecho capital de mi vida personal. Todo ha merecido la pena por ella. Por tí».
Tras recordar su paso por la ULE, “que con su creación en 1979 despertó un a gran ilusión en toda la provincia”, se ha centrado en su labor política, que fue guiada por el doble propósito de dignificar, “reconociendo derechos para combatir la desigualdad, la discriminación social por cualquier causa, empezando por la de género”, y pacificar “desplegando todos los medios al alcance del gobernante para erradicar violencia”.
El nuevo Honoris Causa de la ULE ha afirmado que su primera prioridad al llegar al Gobierno fue la tarea pendiente de la igualdad efectiva entre mujeres y hombres, que ha dicho que fue abordada a través de tres leyes: la Ley de Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres, la Ley contra la Violencia de Género, y la Ley de Plazos para la Interrupción Voluntaria del Embarazo’. Sobre estas actuaciones se ha congratulado al apuntar que “bien parece que no yerra quien se anticipa, sino quien posterga. Pero me alegra que quien no acertó a verlo en un principio ahora rectifique para favorecer esa asunción muy mayoritaria de lo que entonces fueron nuevos derechos”.
Zapatero ha citado otras leyes como la que reconoció el derecho de las personas a contraer matrimonio con personas de su mismo sexo, o la de promoción de la Autonomía Personal y atención a las personas con discapacidad, que respondieron al propósito de “vivir en una sociedad decente que afirme y ampare la dignidad de las personas”. También ha dedicado unas palabras a “la necesidad de que toda acción política se guíe por el rechazo a la violencia, por el afán de la paz”, al tiempo que ha afirmado que abraza “la idea de que una generación no muy lejana vea abolir la violencia, la guerra como una opción entre pueblos y naciones”.
Finalmente ha dicho que hay un lugar en el universo que para muchos de nosotros es el principio de todo. “Ese lugar es León. Yo siento hoy que nunca me fui de León, que nunca dejé esta Universidad”.
La ULE gana un nuevo miembro de excepcionales méritos personales
Juan Francisco García Marín ha retomado en sus palabras algunas de las ideas expresadas por Zapatero, y ha reconocido que durante su mandato “se aprobaron leyes que han sido fundamentales e imprescindibles en el desarrollo de la sociedad española”. También ha destacado su contribución en la “consecución y mantenimiento de la paz dentro y fuera de nuestras fronteras”, y otros logros de gran importancia como la Unidad Militar de Emergencia, la creación del INCIBE en León, o de la Ciudad de la Emergía (CIUDEN) en el Bierzo, así como el Instituto Confucio.
El Rector se ha referido al cambio experimentado por la ULE desde que Rodríguez Zapatero se licenció en Derecho en 1982, cambio que ha sido muy notable, y ha dicho que ahora es “una universidad dinámica, vital, arraigada con su entorno, pero con gran proyección internacional, que cada año se supera y mejora en todos sus aspectos, como así lo reflejan las evaluaciones, nacionales e internacionales a la que es sometida cada año”.
Para concluir, se ha dirigido al nuevo Doctor Honoris Causa para decirle que “Esta es su universidad, a la que os habéis incorporado como un miembro más de claustro, con todos sus derechos y obligaciones”, y se ha mostrado muy satisfecho porque la ULE “gana un nuevo miembro de excepcionales méritos personales, y nos enorgullecemos de que así sea”.
