El Parador de San Marcos es el edificio emblemático por antonomasia de la hostelería leonesa y como ya se ha afirmado desde numerosos sectores, desde UPL han criticado no solo el cierre justo antes de las navidades de sus instalaciones para la remodelación en un momento en el que ni tan siquiera se atisba la fecha prevista para el comienzo de las obras, lo cual choca con cualquier criterio medianamente razonable de negocio, porque cualquier negocio de hostelería apura hasta el último momento para su cierre antes de una remodelación.
Siendo evidente que a Paradores su empresa estatal le importa muy poco la rentabilidad y le importa muy poco el impacto en León y en su turismo, máxime en este año en que León es la capital española de la Gastronomía, y es el único hotel de cinco estrellas de la ciudad.
Por otra parte, desde UPL también han puesto el punto de mira en el incalculable patrimonio artístico que atesora el Parador de San Marcos, habiendo exigido a Paradores que facilite y haga público un inventario de la totalidad de las obras muebles y la riqueza artística que atesora.
Esta situación, que han planteado antes del cierre del parador al público, que puede suponer que aprovechando estas obras, este patrimonio que, en definitiva, aunque sea de titularidad de Paradores del Estado, no deja de ser un patrimonio insito en la sociedad leonesa, y que por tanto debe, una vez finalizadas las obras, volver al mismo sitio donde se encontraba.