En 1923 Castilla y León no existe y que no se puede hablar de nada relacionado con dicha autonomía con sus límites oficiales antes de 1983, fecha en la que se perpetró el engendro autonómico.
«Los medios de comunicación se han hecho eco de una auténtica impostura y falsedad en relación con el supuesto centenario de la Federación de Castilla y León de fútbol en un nuevo episodio de manipulación procedente de Valladolid, esta vez protagonizado por citada federación, denuncia Eduardo López Sendino», Vicesecretario de UPL
Lopez Sendino afirma que «dicha federación pretende celebrar un centenario cuando fue fundada en 1987 y no tiene mayor recorrido histórico».
Haciendo un poco de memoria, es cierto que en 1923 existió una federación llamada Castellano-Leonesa que incluía a las provincias leonesas, Valladolid, Palencia y Burgos. Pero también es cierto que esa federación, que se limitaba tan sólo a organizar torneos de fútbol llamado entonces “amateur”, dejó de existir en 1931 como aparece en varias fuentes de prensa escrita (Véase el suplemento de ABC,Blanco y Negro del 31 de julio de 1932).
En el caso de los equipos de la provincia de León, entre 1931 y 1952, pasan por varias federaciones: Asturiana, Leonesa, Castellana (de Madrid) Astur-Montañesa… y en dicho año 1952 entran en la Federación Oeste, fundada dos años antes. Esta tampoco coincidía con los límites de la actual federación ya que las provincias de Soria, Segovia y Ávila no estaban en ella, además de contar durante un breve periodo de tiempo con Cáceres.
La Federación autonómica pasa por alto dos factores. La primera es que las federaciones previas a las autonomías no siguen siempre un criterio regional, sino de agrupación de provincias o bien cercanas, o bien de fácil comunicación. Por otra parte, que en 1923 Castilla y León no existe y que no se puede hablar de nada relacionado con dicha autonomía con sus límites oficiales antes de 1983, fecha en la que se perpetró el engendro autonómico.
Efectivamente es en 1987 cuando se forma la actual Federación. Toman como base la Oeste, señala el Vicepresidente de UPL «eso es cierto, pero no podemos hablar de la misma entidad: origen distinto, estatutos distintos, provincias distintas, organigrama distinto… Recordemos que la actual se forma con la entrada de las provincias de Segovia y Ávila procedentes de la federación madrileña y de Soria procedente de la aragonesa. Estas provincias, por cierto, han estado sin coincidir durante décadas con otras como por ejemplo León. ¿Cómo van a explicar allí ese centenario? ¿Qué centenario van a explicar en Soria, cuando es provincia ajena a las organizaciones hechas desde Valladolid hasta 1987?»
Otra muestra de la falsedad y manipulación que está realizando la Federación, sigue diciendo López Sendino «es que está dando varias versiones de lo que quiere celebrar: cien años de fútbol en Castilla y León (que por provincias serían más), cien años de la primera federación de clubes (que sería una efeméride solo y que deja fuera al 33% del balompié autonómico actual), la continuación de aquella federación (disuelta en 1931 y con 50 años de impás en el que otras federaciones cumplen su función) y los 100 años de la actual federación (que es mentira)».
Sin duda estamos, afirma el vicepresidente de UPL «ante otro episodio de manipulación histórica y de una deleznable utilización del deporte para fines políticos: es lamentable utilizar una institución deportiva para justificar una identidad que no existe y un pasado común lleno de tantos matices que no podría tratarse como tal, y lo peor es que correveidiles como el presidente de la delegación leonesa se apuntan a ese carro de despropósito histórico».
Desde UPL, finaliza López Sendino «no podemos más que denunciar el desatino histórico de la pretensión de celebración de un centenario absolutamente falso de la Federación de Castilla y León de fútbol y que no constituye más que una nueva manipulación de la Junta de c. y León para intentar hacernos creer que esta comunidad existe desde mucho antes de la creación oficial de la propia comunidad, lo cual es otra falsedad más, pero la historia es la que es por mucho que pretendan falsearla».