Una nueva señalización permite realizar un recorrido por los elementos etnográficos del río Tormes.
Salamanca cuenta con un nuevo itinerario natural-histórico y cultural vinculado a la recuperación de vestigios etnográficos que han sido restaurados en el entorno del río Tormes. Junto con las tareas de consolidación y restauración llevadas a cabo por el Área de Urbanismo y el Servicio de Mantenimiento, se han instalado paneles informativos que permiten a cualquier visitante interpretar el carácter y origen de estos los restos y la función histórica de los mismos, haciendo énfasis en su importancia para la ciudad de Salamanca en épocas pasadas.
Entre los elementos señalizados se encuentran las Norias del Paseo Fluvial, un conjunto de norias tradicionales destinadas al riego, la Noria de los Jerónimos, una noria tradicional de tiro o el Depósito de captación de agua de 1874 de La Aldehuela, de la primera red de abastecimiento ligada al depósito de Prosperidad en el alto de San Mamés (hoy Museo del Comercio).
Los nuevos carteles permiten un recorrido autoguiado al aire libre, en el entorno natural del río Tormes y, en todos los casos, recogen información histórica de cómo eran utilizados esos elementos en su época, con imágenes y mapas que permiten visualizar la función que cumplían para la ciudad, incorporando además códigos QR con la información en audios y lectura fácil para facilitar la accesibilidad cognitiva a distintos colectivos sociales. De este modo, Salamanca ofrece un nuevo recorrido cultural que pone de manifiesto una vez más la relación entre naturaleza y patrimonio que la ciudad quiere promover a través de la estrategia Savia Red Verde.
Estos restos etnográficos suponen vestigios de la época en la que los ríos fueron centros económicos polivalentes de primer orden que acogían no solo industrias de transformación (textiles, batanes) sino también a actividades domésticas como el lavado de ropa o primarias como la agricultura y la pesca. En el caso concreto de las norias, se trata de elementos hidráulicos vinculados a las huertas históricas aledañas a la ciudad que estuvieron en uso productivo hasta bien entrado el siglo XX.
La recuperación de estos elementos forma parte de una serie de actuaciones previstas en el Plan Especial de Infraestructura Verde y Biodiversidad de Salamanca sobre el patrimonio cultural asociado al río y al medio natural salmantino, que han sido consideradas estratégicas tanto por el Plan de Gestión de la Ciudad Vieja de Salamanca como por Savia Red Verde Salamanca, integrando naturaleza y patrimonio para propiciar una mejor salud urbana y nuevos recursos turísticos.