El estudio sobre la erosión y protección de la piedra de la Catedral fue una propuesta de la empresa Decolesa en la que han trabajado 15 investigadores. El ‘Premio Especial Nuevos Emprendedores’ fue para un proyecto presentado por siete investigadores del grupo BALAT de la ULE.
Un estudio sobre la erosión y protección de la piedra de la Catedral y otro proyecto sobre ingredientes naturales para añadir sabor y calidad al pan sin gluten, han resultado premiados en la octava convocatoria del concurso Desafío Universidad-Empresa 2020.
Con una dotación en premios de 45.000 euros, el certamen, dirigido a investigadores universitarios y empresas con interés en desarrollar proyectos conjuntos de I+D+i, ha otorgado además este año un accésit encaminado a paliar las consecuencias sanitarias y sociales provocadas por la COVID-19.
El primer premio recayó en el proyecto interuniversitario liderado por la investigadora María Fernández Raga de la Universidad de León (ULE), en el que también están presentes la Universidad de Valladolid (UVA) y el CSIC, donde han participado un total de 15 investigadores, de los grupos de investigación IDEAS y ATMOSENV de estas instituciones. Se trata de ‘Estudio del impacto de la erosión por salpicadura sobre el patrimonio pétreo calizo y metodología para su protección (GRAPHENANTIUM)’, una propuesta de recubrimiento basada en grafeno para proteger monumentos de los agentes meteorológicos. La compañía que planteó el desafío fue Decolesa, empresa leonesa especializada en la restauración de patrimonio histórico arquitectónico. El objetivo de la iniciativa es, por un lado, encontrar un tratamiento efectivo frente al debilitamiento y pérdida de material pétreo y, por otro, desarrollar una herramienta que ayude a priorizar las actuaciones según distintas exposiciones, vulnerabilidad, valoración económica, localización, dificultad y coste económico.
El siguiente protagonismo para la ULE llegó con el ‘Premio Especial Nuevos Emprendedores’ que fue para el proyecto ‘Ingredientes naturales para añadir sabor y calidad al pan sin gluten’, presentado por siete investigadores del grupo BALAT de la ULE. La iniciativa busca obtener pan sin gluten con mejor calidad nutricional y sensorial mediante la incorporación de masa madre y algas, con objeto de aportar sabor y aroma, mejorar la textura e imprimir peculiaridad al producto. Se trata de una propuesta presentada en respuesta a una demanda de la empresa leonesa de reciente creación Alimentos Dalis, S.L.
El proyecto ‘Aproximaciones sintéticas a la preparación de hidroxiantraquinonas Antraquin-Sintorg’, elaborado por ocho investigadores del grupo de investigación QO-3 de la Universidad de Burgos (UBU), se alzó con el segundo premio del certamen.
La iniciativa busca reemplazar el vanadio como especie activa en el electrolito de las baterías de flujo, ello permitirá la sustitución de las actuales tecnologías de almacenamiento, no sostenibles debido a su degradación a medio plazo, por las baterías de flujo. La empresa que planteó la demanda fue Energy Storage Solution S.L. de Madrid.
Finalmente, el proyecto propuesto por el equipo investigador de la Universidad Isabel I de Castilla, compuesto por cuatro miembros del grupo de investigación CITAI, como respuesta a una demanda del empresario burgalés Jorge Miñón ha conseguido la tercera posición. ‘AgroSoilHum. Sistema para la estimación del agua disponible en los suelos agrícolas’ da respuesta a la necesidad de estimar la disponibilidad de agua en el suelo empleando múltiples fuentes de datos.
Por último, el jurado también premió con el accésit COVID-19 para entidades sin ánimo de lucro la propuesta ‘AuRehab (Augmented Rehabilitation): Aplicación para la rehabilitación/formación de personas con discapacidad a través de Realidad Aumentada’ de la UBU, en respuesta a la demanda planteada por la Confederación de personas con discapacidad física (COCEMFE Castilla y León ota incluyendo la realidad aumentada, evitando desplazamientos, mejorando la calidad asistencial y aumentando la seguridad de pacientes y profesionales en el contexto actual marcado por la pandemia de la COVID-19 y la necesidad de mantener una distancia de seguridad.
Plan TCUE 2018-2020
La Consejería de Educación apoya desde el año 2008 la transferencia de conocimiento desde las universidades de la Comunidad hacia la empresa, a través de lo que ya entonces denominó Plan TCUE (acrónimo de Transferencia de Conocimiento Universidad-Empresa). El objetivo siempre ha sido aumentar la relación entre el mundo académico y empresarial para alentar la incorporación del conocimiento como activo relevante de la economía de la Comunidad.