Os proponemos un plan con niños distinto a través de 7 espacios únicos. Cada una de estas sedes sigue una temática diferente gracias a fósiles de diferentes edades geológicas. Podrás descubrir más sobre gigantismo y sobre el dinosaurio más grande de Europa; ver los huesos originales de Tastavinsaurus sanzi; observar los insectos fosilizados en ámbar, pasear por un bosque de hace 110 millones de años, sumergirte a través de los fósiles marinos de Albarracín en los mares jurásicos y saber más sobre las nuevas especies de dinosaurios, cocodrilos y tortugas, entre otros, halladas en una mina de carbón.
Inhóspitak, en Peñarroya de Tastavins. Uno de los dinosaurios más grandes de Europa vive aquí. Un ejemplar de 17 metros de longitud, el Tastavinsaurus sanzi, que deja sin palabras a adultos y pequeños. En Inhóspitak no sólo se pueden apreciar restos originales de sus huesos, sino también aprender cómo se realiza una excavación arqueológica.
Legendark, en Galve. Entre otras experiencias, esta sede ofrece la posibilidad de contemplar una réplica de una familia de aragosaurus a tamaño real, el primer dinosaurio definido en España. También podréis admirar los restos originales del Iguanodon, un dinosaurio encontrado en Galve. Como última curiosidad, en Legendark es posible observar una reproducción de un nido de huevos.
Región Ambarina, en Rubielos de Mora. En esta sede podemos conocer más a fondo el Moropus, un mamífero extinto (no todo eran reptiles en la época jurásica); además de adentrarse por la espectacular colección de insectos descubiertos que son contemporáneos de los dinosaurios, hace más de 100 millones de años. Otra actividad divertida para hacer con los niños es aprender las técnicas que emplean los paleontólogos para clasificar los fósiles.
Bosque Pétreo, en Castellote. Esta sede propone un apasionante viaje a través de la paleogeografía, para conocer los secretos ocultos de la Tierra, como la convivencia entre mamíferos y dinosaurios en Castellote hace 125 millones de años, a través de una réplica de un bosque carbonífero y fósiles de yacimientos cercanos, apoyados por unos espectaculares soportes audiovisuales.
Mar Nummus, en Albarracín. ¡Cuidado los más asustadizos! Mar Nummus es la casa del Liopleurodon, el mayor depredador conocido. Aquí podremos conocer el proceso de formación de un fósil, el principal objeto de estudio de los paleontólogos. Mar Nummus es también la oportunidad perfecta para adentrarse en lo que antaño fue el Mar de Tethys, el percusor del Mar Mediterráneo y que hace 150 millones de años cubría la sierra de Albarracín.
Titania, en Riodeva. Con el gigantismo como eje principal, esta sede se centra en el colosal Turiasaurus riodevensis, el más grande de Europa, además de contemplar la mitad superior de su esqueleto a tamaño real. Además, a través de las rocas y estratos de Riodeva, podréis conocer cómo era el paisaje en el que vivían los dinosaurios.
Valcaria, en Ariño. Esta sede nos propone un recorrido por la fauna y la vegetación hace 111 millones de años a través de reconstrucciones paleobiológicas, ¡una verdadera jungla! También conoceréis una réplica del Europelta carbonensis, así como recreaciones paleoambientales que muestran cómo son los fósiles extraídos del carbón.
Territorio Dinópolis propone toda una ruta para disfrutar de la vuelta al cole en familia, viajando por el pasado geológico de la provincia de Teruel en una escapada de fin de semana apasionante, muy apta para los más aventureros de la casa.