Las acciones de control se llevarán a cabo hasta el 7 de agosto.
La Embajada de Portugal informa que, desde el pasado sábado, 22 de julio, se vienen realizando a acciones puntuales de control documental en las fronteras internas del país, de forma excepcional. Estas medidas tienen como objetivo salvaguardar posibles amenazas al orden público y la seguridad interna durante la realización de las Jornadas Mundiales de la Juventud y la visita del Papa Francisco a Lisboa.
Las acciones de control se llevarán a cabo hasta el 7 de agosto, y es importante destacar que las fronteras permanecerán abiertas. Sin embargo, los controles serán selectivos y direccionados, basados en información y análisis de riesgo.
El propósito de estas medidas es garantizar la seguridad y el bienestar de los participantes y ciudadanos durante este evento de importancia mundial. Portugal reafirma su compromiso de recibir a los visitantes de manera acogedora, al mismo tiempo que vela por la integridad del país.
Con estas acciones, Portugal reafirma su compromiso con la seguridad interna y el orden público, creando un ambiente propicio para la celebración de este evento de relevancia mundial, en el que la juventud se une en espíritu de paz y armonía
En agosto se celebra en Lisboa la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), un encuentro de miles de jóvenes de todo el mundo con el Papa.
Con los jóvenes como protagonistas, este evento es simultáneamente una peregrinación, una fiesta de la juventud, una expresión de la Iglesia universal y un poderoso momento de evangelización para el mundo juvenil.
La Jornada Mundial de la Juventud reúne a miles de jóvenes, presentándose como una invitación a una generación decidida a construir un mundo más justo y solidario, pero que también busca promover la paz, la unidad y la fraternidad entre los pueblos y las naciones.
Con una identidad claramente católica, está abierta a todos, estén cerca o lejos de la Iglesia. Los momentos culminantes son las celebraciones (actos centrales) a las que asiste el Papa, como la ceremonia de bienvenida y apertura, el Vía Crucis, la vigilia y, el último día, la misa de envío.