Podemos Sanabria denuncia un procedimiento lleno de irregularidades en el Ayuntamiento de Cobreros que realiza una concesión administrativa de casi 150 hectáreas comunales para la instalación de un parque fotovoltaico de 100 megavatios.
A juicio de Podemos Sanabria » Se trata de terrenos comunales de los que el Ayuntamiento carece de titularidad jurídica, siendo de propiedad común desde 1950″
Vivimos un proceso de transición hacia un modelo energético renovable y verde. Pero las zonas menos pobladas corren el riesgo de volver a sufrir una nueva época de pantanos, esta vez con molinos y
placas solares.
Alberto Fernández, portavoz de Podemos en Sanabria, señala la realidad » España padece un proceso especulativo feroz en torno a la instalación de explotaciones destinadas a las energías renovables, que han atraído a empresas, como Atitlam Grupo Empresarial, perteneciente, a su vez, a CERYCER Inversiones inmobiliarias S.L. y sus empresas concesionarias Gorilla Invest y Atelest Invest, para la ejecución del negocio que subyace de esa concesión administrativa: hacerse con un terreno barato, aprovechar subvenciones y, más adelante, vender a las grandes compañías eléctricas esta explotación.»
Para Podemos Sanabria » Estamos ante un nuevo negocio especulativo. Para que una comarca obtenga energía gratis para sus habitantes e industrias, no son necesarias las dimensiones de estos megaproyectos, que sí están destinados a la inversión de capitales extranjeros. Una producción fotovoltaica pero lejos del paisaje de los que la necesitan.
«Hay tierras de uso comunal que no debieran ponerse al servicio de los intereses de una empresa energética», señala Podemos Sanabria «y menos sin conocimiento o autorización de los vecinos de la zona, pese a los clásicos “cantos de sirena” de la supuesta creación de puestos de trabajo locales.»
Diversos estudios (como el dirigido por la profesora del Departamento de Análisis Económico de la Universidad de Zaragoza, Rosa Duarte) demuestran lo efímero de este repunte de puestos de trabajo que apenas llegan más allá de la construcción e instalación de la planta, una vez instalada, habitualmente los trabajos se cubren con subcontrataciones y empresas deslocalizadas que abarcan amplias zonas del territorio para abaratar costes.
Los parques fotovoltaicos tienen un gran impacto visual; expulsan a los agricultores y ganaderos de tierras de aprovechamiento ambiental; limitan tanto el uso como los accesos colindantes por las infraestructuras de acceso a la red eléctrica que requieren; perjudican a la flora y fauna autóctonas; y contaminan los acuíferos y las tierras con los productos destinados a la limpieza de las placas solares.
Podemos Sanabria exige la anulación de pleno derecho de esta concesión administrativa, por ello participará en la manifestación en contra de la misma, el próximo sábado, en la capital de Zamora, y pide que se informe a la ciudadanía de qué otros proyectos de esta envergadura está permitiendo la Junta de Castilla y León: la España vaciada no puede llenarse sólo de placas y molinos.
