La Comisión Territorial de Patrimonio Cultural ha acordado aprobar el proyecto de restauración y reposición de los distintos elementos que configuran los pináculos de la crestería del claustro de la Catedral de León, catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC).
Las obras que se llevarán a cabo en el monumento pasan por la preconsolidación de fábricas con zonas descohesionadas, limpieza de fábricas de piedra por medios manuales, pátinas biogénicas, pátinas de ‘enmugrecimiento’, pátinas de oxidación y limpieza de costras.
Además, entre las modificaciones, también se deberá realizar una consolidación intergranular, sustituir los elementos perdidos y garantizar un tratamiento de protección, consolidación e hidrofugación de las superficies de piedra con disoluciones de hidróxido de cal y pigmentos naturales.
Finalmente, para garantizar un correcto desarrollo de las obras, y no poner en peligro ningún elemento del BIC, se redactarán distintos ensayos y estudios a medida que avancen los trabajos.
Texto y fotografías: Comunicación jcyl