La existencia de talleres posiblemente itinerantes dedicados a la fusión y comercio de pequeños objetos de bronce en el noroeste de la Hispania tardía, se contrasta gracias a este ejemplo extraordinario en cuanto a calidad y estado de conservación.
La pieza fue hallada fortuitamente en Cimanes de la Vega en 1979 en una interesante villa romana, no excavada pero conocida por materiales diversos (cerámicas, restos metálicos, fragmentos de vidrios, fragmentos musivos de decoración geométrica…).
La función de este extraordinario objeto ha sido discutida por la presencia de otros ejemplos, similares en cuanto a la forma, que tienen como más antigua filiación el arte sumerio, donde aparecen representados, incluso en el Estandarte Real de Ur. Empleados para conducir las riendas a través de las argollas laterales en los carros de guerra, quizá el uso sea diferente en este caso, pues algunos estudiosos lo han identificado como accesorio para la suspensión del carro a modo de amortiguador empleando para ello cinchas de cuero.
Independientemente del uso de la pieza, la calidad artística del ejemplo que nos ocupa es innegable. Este tipo de objetos tienen una doble estructura, por un lado la funcional, la caja de enmangue y los pasadores laterales, rematados en este caso como hojas de acanto. Y la ornamental, aquí provista de un conjunto escultórico en la parte superior que presenta una escena cinegética habitual en la antigüedad: un felino apresando un bóvido. Una iconografía presente en el arte desde los orígenes de la figuración, importada desde el Mediterráneo oriental y asumida por ambientes funerarios de prestigio en la Meseta a partir del siglo III d.C.
La pieza del mes constituye una oportunidad para conocer más detenidamente alguno de los bienes expuestos en el Museo, mediante una explicación detallada durante las visitas guiadas, que se desarrollan gratuitamente de martes a domingo, a las 12’30 horas.
Fuente, fotografía y más info: http://www.museoscastillayleon.jcyl.es