Miranda do conmemora el próximo 17 de septiembre los 20 años de presentación del texto de la Lengua Mirandesa en la Asamblea de la República.
En Portugal, la única lengua regional y minoritária reconocida por el Estado es la lengua mirandesa, idiomas variante de la familia asturleonesa, habla del antiguo reino de León, que se habla en el municipio de Miranda do Douro municipio y en tres aldeas en el vecino condado de Vimioso y los miembros emigrados de la en comunidad mirandesa.
El reconocimiento oficial de esta lengua llegó el 19 de noviembre de 1998 al Parlamento de Portugal cuando se promulgó un decreto ley (Ley n.º 7/99, de 29 de enero de 1999 de la República Portuguesa. «Reconocimiento oficial de derechos lingüísticos de la comunidad mirandesa») que reconoce el derecho de los mirandeses a utilizar su lengua secular. Después de este acto, se produjo la Convención Ortográfica Mirandesa, planteando alternativas y soluciones para los retos a los que se enfrenta esta lengua en la actualidad: reducción de la variación ortográfica, continuidad de la tradición gráfica, el problema de los neologismos, la claridad, simplicidad y flexibilidad. En 1999 el ayuntamiento de Miranda do Douro y la Universidad de Lisboa elaboraron una norma ortográfica basada en la del portugués . Su normalización y promoción están a cargo del Anstituto de la Lhéngua Mirandesa, creado el 1 de enero de 2003.
El mirandés es hablado por unas 15.000 personas (si se incluyen hablantes de segunda lengua) y alrededor de 5.000 si solo se tienen en cuenta los hablantes de primera lengua. Es hablado en todo el municipio de Miranda do Douro salvo dos aldeas y en otras tres del municipio de Vimioso. La enseñanza del mirandés en las escuelas tiene lugar desde el curso 1986/87. La enseñanza de la lengua se lleva a cabo en todas las escuelas de las aldeas y pueblos del municipio de Miranda, además de en la facultad que mantiene la Universidad de Trás-os-Montes en Miranda do Douro.
“La Lhéngua Mirandesa, doce cumo ua meligrana, guapa i capechana, nun yê de onte, detrasdonte ou transdontonte mas cunta cun uito séclos de eijistência.
Sien se subreponer a la “lhéngua fidalga i grabe” l Pertués, yê tan nobre cumo eilha ou outra qualquiêra.
Hoije recebiu bida nuôba. Saliu de l absedo i de l cenceinho an que bibiu tantos anhos. Deixou de s’acrucar, znudou-se de la bargonha, ampimponou-se para, assi, poder bolar, strebolar i çcampar l probenir.
Agarrou l ranhadeiro para abibar l lhume de l’alma e l sangre dun cuôrpo bien sano.
Chena de proua, abriu la puôrta de la sue priêça de casa, puso fincones ne l sou ser, saliu pa las ourriêtas i preinadas..
Lhibre, cumo l reoxenhor i la chelubrina, yá puôde cantar, yá se puôde afirmar. A la par de l Pertués, a partir de hoije, yê lhuç de Miranda, lhuç de Pertual.”