Nueva carta, nuevas ideas, pero un mismo objetivo: cautivar los sentidos y hacer de la experiencia de sentarte a la mesa de ‘Kalma’ algo inolvidable. Imagina un recorrido por otras culturas y otras formas de entender la gastronomía sin levantarte de la mesa. Un viaje por influencias, detalles y elementos de otras cocinas, pero manteniendo esa esencia tan mediterránea que el chef Javier Sáez-Bravo y su equipo mantienen fielmente. El restaurante a la carta del hotel Madrid Marriott Auditorium, ‘Kalma’ se adelanta a la temporada estival con una nueva carta que seguro dará mucho que hablar por su ingenio, por su atrevimiento y, desde luego, por su impresionante sabor.
Dedicación, cariño y talento. Son algunos de los ingredientes con los que el equipo liderado por el chef Javier Sáez-Bravo trabajan cada día, en cada servicio ofrecido en ‘Kalma’, el restaurante a la carta de cocina mediterránea del hotel Madrid Marriott Auditorium. Un ambiente elegante, tranquilo y sofisticado, conseguido por una atmósfera que solo ‘Kalma’ es capaz de transmitir, se magnifica con una propuesta insuperable.
De la carta impresiona todo. Desde las opciones para compartir, pasando por los platos de la huerta, sopas, arroces, carnes y pescados. Pero es reseñable detenerse en los platos del día. Una sorpresa al paladar por cada día de la semana: lunes de rabo de toro estofado con patatas; martes de menestra de verduras de temporada y pato laqueado; miércoles de arroz caldoso con pescados y mariscos; jueves de cocido madrileño completo y viernes de albóndigas de calamar con almejas en salsa verde. Opciones todas ellas pensadas para no complicar al comensal con decisiones y garantizar una elección acertadísima para un almuerzo espectacular.
A través de la carta podemos encontrar verdaderas joyas culinarias como un tratar de atún de almadraba en brioche con toque de trufa negra o un pulpo a la parrilla con patatas machaconas y mahonesa de pimentón de la Vera. Galicia, Castilla la Mancha y Extremadura representadas en un solo plato… ¡Magia!
Opciones más ligeras como una deliciosa ensalada de lechugas vivas, aguacate, bogavante y yogurt griego o una ensalada de espinacas frescas con higos, burrata y albahaca. Algo más contundente como un guiso de alubias de la Virgen con verduras de temporada o un arroz negro con sepia y gambones no puede faltar en un menú de semejante nivel. Como tampoco pueden faltar sugerencias de pescados tales como un rape en fricandó con gel de cebolla, chipirones y habitas tiernas, o un lomo de lubina a la mallorquina con guiso breve de patatas y pimientos.
Los amantes de la buena carne no están exentos de gozar del menú. Una sugerente trilogía de cochinillo, puré y acelgas rojas mini; un entrecote de ternera con tomate a la parrilla, orégano y patatas rejilla o una balotina de pollo de campo y langostinos con zanahorias babyrisoladas.
Como siempre, hay que dejar un hueco para el postre para poner el broche de oro a una velada maravillosa. Nunca decepcionará el flan increíble en Kalma; un lemon pie sobre galleta de cítricos; el pionono del Sacromonte granadino o una tarta de hojaldre de manzana con su compota caramelizada.
Sobra decir, que siempre habrá una opción de degustar estos magníficos platos con las mejores propuestas de vinos y vinos dulces para los postres de la bodega de ‘Kalma’. El mejor guía en esta experiencia, es sin duda alguna José Manuel del Fresno, maître de la sala. Su conocimiento y años de dedicación son claves a la hora de recomendar el mejor vino para cada plato dentro de la más que extensa carta de vinos.
No se puede pedir más ante tal muestra de innovación, de buen trato al producto nacional de calidad y la honestidad y buen hacer de una cocina que temporada tras temporada da lo mejor de sí para hacer las delicias del comensal de ‘Kalma’. Un cliente que sabe lo que quiere, es exigente y sabe apreciar los diferentes matices y secretos que se esconden en un menú con personalidad y esencia tan marcada.