Los vuelos previstos a España en diciembre alcanzan el 81% de los niveles prepandemia. Reyes Maroto: “Es un síntoma claro de la confianza que el destino España genera en los mercados internacionales”.
Madrid, 12 de diciembre de 2021.- Los asientos que las compañías aéreas ofrecen para volar a España este mes de diciembre superan los 5,7 millones y alcanzan ya el 81% de las capacidades aéreas del mismo mes de 2019, según los datos publicados hoy por Turespaña.
Reyes Maroto: “Es un síntoma claro de la confianza que el destino España está consiguiendo generar en los mercados internacionales, unido a la previsible visita de los españoles residentes en el extranjero por Navidad, muchos de los cuales no vinieron el año pasado debido a las restricciones que imperaban entonces. Un año después, gracias a la vacunación y a una gestión eficaz de la pandemia, los datos reflejan que estamos mucho mejor, con posibilidad de movernos y disfrutar de nuestro tiempo de ocio con seguridad, respetando las medidas de protección que siguen vigentes.
Mercados como Polonia o Países Bajos muestran para este mes de diciembre una recuperación total, con un volumen de capacidades programadas superior a la del mismo mes de 2019 (+9,4% en el caso de Polonia, +1,2% en el caso de Países Bajos). En el extremo contrario se sitúan países que se mantienen cerrados como China, con una caída del -91,1% respecto a diciembre de 2019; o Rusia (-73,7%), afectada por la restricción de la UE a los viajes no esenciales.
En el caso de Estados Unidos, los asientos previstos se sitúan en torno a la mitad de los volados en 2019 (-47,5%). Desde Reino Unido, las capacidades previstas están al 77,2% de los niveles de diciembre de 2019.
Las previsiones de cara al trimestre diciembre-febrero son aún mejores y sitúan a más mercados europeos como Dinamarca, Irlanda o Suiza en plena recuperación. No obstante, hay que tener en cuenta que la programación comunicada por las aerolíneas dista mucho de estar ajustada más allá de un horizonte de unas tres a seis semanas, debido tanto a la incertidumbre del mercado y las restricciones a los viajes como a la normativa y recomendaciones europeas que obligan a las compañías a cancelar con unas condiciones de horizonte limitado para conservar sus derechos históricos.