Esta moción se presenta por parte de todos los grupos municipales, y hoy más que nunca, es importante mostrar esta unidad, teniendo en cuenta la agresión sufrida en las calles de la ciudad en el pasado jueves 25 de junio
El 26 de diciembre de 1978, se eliminaba el delito de homosexualidad incluido en la Ley 16/1970, de 4 de agosto, de peligrosidad y rehabilitación social que reconocía como “supuestos del estado peligroso” los vagos habituales, los rufianes y proxenetas y los que realicen actos de homosexualidad (art 2.3.) y que establecía penas que iban desde multas hasta cinco años de internamiento en cárceles o centros psiquiátricos para su “rehabilitación”.
Con su publicación en el BOE el 11 de enero de 1979 cesaba la ilegalidad de la homosexualidad en España, un mes después, las personas encarceladas por su condición sexual y de género, salían de las cárceles. A pesar de ello, las personas LGTBI continuaron siendo perseguidas bajo la figura de la ley de escandalo público, modificada en 1983 y derogada en 1989
Los derechos de las personas LGTBI están protegidos con arreglo a la legislación internacional sobre derechos humanos en vigor, aunque se precisan a menudo medidas concretas para garantizar que las personas lesbianas, gais, bisexuales, transgénero e intersexuales disfruten plenamente de los derechos humanos. Las personas LGTBI tienen los mismos derechos que todas las demás; no se crean nuevos derechos humanos para ellas ni ninguno de ellos tiene que negárseles.
En el momento actual, atravesamos tiempos de cambios, de convulsión y de incertidumbre. Los países en los que se han ido consolidando las conquistas históricas del colectivo LGTBI, están en peligro de vivir una involución política, social y económica. Las garantías que dan los derechos conquistados y refrendados en legislaciones positivas, como la Ley 13/2005 de matrimonio entre personas del mismo sexo en España, y cuya consecuencia se refleja en sociedades más tolerantes, justas y diversas, pueden sufrir un revés que nos haga retrotraernos a tiempos más difíciles a los que nunca creímos que corríamos el riesgo de volver.
Hoy más que nunca, es importante renovar el compromiso de esta administración local con la igualdad de trato y de oportunidades a favor de la normalización social de quienes tienen una orientación sexual distinta de la mayoritaria y/o se identifican y expresan con otro género distinto al que socialmente se les adjudica.
Este pasado jueves, una pareja formada por dos hombres, ha sufrido una agresión en un barrio de la ciudad por el simple hecho de ser pareja.
Actitudes como estas, que condenamos con rotundidad, han de ser eliminadas de nuestra sociedad, es por ello que desde las calles y desde las instituciones, debemos arrimar el hombro juntos, combatir la LGTBIfobia, es trabajo de todos.
Por ello, traemos para someter al pleno de la corporación los siguientes:
ACUERDOS
PRIMERO: Contribuir, en las competencias que le son propias a este Ayuntamiento, al desarrollo y aplicación de todas las medidas previstas en la legislación vigente contra toda discriminación por orientación sexual, identidad de género y diversidad familiar, con la finalidad de erradicar de nuestra sociedad cualquier tipo de LGTBIfobia en el ámbito familiar, escolar, laboral, social y/o político.
SEGUNDO: Promocionar institucionalmente las conmemoraciones principales del movimiento LGTBI, como el próximo 28 de junio (día del Orgullo y la Liberación LGTBI).
TERCERO: Dotar a las bibliotecas públicas con fondos bibliográficos relacionados con la homosexualidad, la bisexualidad, la transexualidad y la intersexualidad desde actitudes de respeto y no discriminación y un enfoque de diversidad y Derechos Humanos.
CUARTO: Simbolizar el firme compromiso de este Ayuntamiento con la igualdad y los derechos del colectivo LGTBI, iluminando el 28 de junio la bandera arcoíris, enseña de la diversidad en la fachada del Ayuntamiento.
QUINTO: Condenar todo tipo de agresiones al colectivo LGTBI, y en especial la agresión homófoba ocurrida en el día de ayer en nuestra ciudad.