La obra pictórica realizada por el pintor Jorge Abbad en óleo sobre tabla retrata a su protagonista en posición frontal y se enmarca en el nuevo realismo español.
La Universidad de Salamanca presentó en la mañana de hoy el retrato oficial de José Ramón Alonso Peña, catedrático de Biología Celular y rector de la institución académica entre los años 2007 y 2009, realizado por el pintor Jorge Abbad-Jaime de Aragón Córdoba.
Esta obra quedará expuesta en la Sala de Retratos del Rectorado, frente al retrato de Miguel de Unamuno, donde se encuentran las imágenes de los catedráticos que desempeñaron la máxima responsabilidad académica durante los siglos XX y XXI, a los que hay que añadir los que se encuentran en el hall, pertenecientes al siglo XIX. El sencillo acto de recepción del cuadro debido a la situación de pandemia estuvo presidido por el rector Ricardo Rivero.
La obra pictórica realizada en óleo sobre tabla retrata a su protagonista en posición frontal y se enmarca en el nuevo realismo español en la línea abierta por el pintor Antonio López. No en vano, Abbad completó su formación en el estudio del genial creador manchego, tras cursar sus estudios en la Universidad Complutense de Madrid. Para el joven artista aceptar este encargo supuso no sólo un reto en su carrera, sino también un privilegio por toda la carga histórica que tiene la Universidad de Salamanca. “Cuando visité por primera vez la Universidad y recorrí todos sus edificios tan cargados de historia sentí una llamada muy poderosa para afrontar la realización de la obra. La verdad es que me sentí muy lleno personalmente y afronté el proyecto con enormes ganas, pero también como mucho respeto”, añade Abbad.
El resultado después de un año de trabajo, desarrollado a lo largo de 2019, es un retrato al que enfrenta la realidad, de forma sobria, al más puro estilo de la tradición española. “La manera de encarar un retrato es tradicional, pero también tiene que tener incorporada la modernidad. El trabajo supuso un acercamiento para captar la realidad sin adornos y transmitir en la obra la personalidad, la inteligencia y la sencillez que desde el primer momento me transmitió José Ramón Alonso”, subraya el autor.
Por su parte, Alonso indicó que proponer un pintor a la Universidad “no fue una tarea fácil. Quería a alguien joven, que lo viviera como una oportunidad de desarrollo y proyección en su carrera artística, que hiciera una obra del siglo XXI y que fuera sensible a la importancia de la Universidad de Salamanca, su trayectoria al servicio de la sociedad y su compromiso con el patrimonio y la investigación, con ese recorrido pluricentenario con firmes raíces en su historia y que se proyecta al futuro”.