El uso de portátil y wifi impera en los estudiantes para la formación online, según una encuesta de CRUE. Sin embargo, Rectorado, Gerencia y Vicerrectorados de Estudiantes e Infraestructuras ya trabajan en otros aspectos que les preocupan.
Fotografía: Martínezld
La crisis sanitaria provocada por la enfermedad del coronavirus COVD-19 ha venido a demostrar la importancia de la formación a distancia y del peso de las clases virtuales y las plataformas educativas para llegar a concluir el curso académico. En ese recorrido que ya alcanza el mes de confinamiento y de suspensión de enseñanza presencial en facultades y escuelas, los estudiantes de la Universidad de León se han visto necesitados de sus dispositivos para seguir la formación online y, precisamente, en este aspecto se centró la encuesta lanzada la semana pasada por CRUE Universidades Españolas para conocer los medios tecnológicos de los que disponen los estudiantes para seguir la formación no presencial y realizar evaluación a distancia.
Los Vicerrectorados de Estudiantes y Empleo y de Actividad Académica de la ULE se sumaron a esta iniciativa que trasladaron a los 9.965 estudiantes. El cuestionario fue respondido por 2.517 alumnos (25,25%) y constata que casi el 90% utiliza un ordenador portátil, aunque también un 79% reconoce que emplea el móvil para la docencia no presencial, frente a los dispositivos menos consumidos como son la Tablet (20,6%) y los PC’s de escritorio (19,9%). Además, en su mayoría, disponen de cámara y micrófono en los dispositivos que utilizan para la educación online, siendo cerca del 79% de los encuestados los que reconocen contar con estas dos herramientas.
Del total de encuestados 2.106 se conecta a través de una Red Wifi, y tan solo 413 lo hacen a través de Internet por cable. Y en cuanto a la calidad de esa conexión el 44,9% del alumnado que ha colaborado en el estudio de la CRUE asegura perder la conexión de vez en cuando, el 42% sostiene que su conexión funciona perfectamente y sin embargo el 13,2% responde que pierde a menudo la conexión, lo que dificulta el seguimiento de la enseñanza on line.
Fotografía: Martínezld
Los porcentajes de satisfacción y descontento están relacionados con el tipo de conexión a Internet del que disponen en sus casas de modo que el 53,2% lo hace a través de fibra óptica, donde la velocidad es rápida y estable aunque más limitada en cobertura de territorio, el 32,3% utiliza ADSL, conexión lenta pero con más red de cobertura que la fibra óptica, el 9,8% cuenta con 4G en el móvil y el resto emplea conexión móvil de baja velocidad o incluso ninguna.
Además del cuestionario de la CRUE, la ULE está realizando una serie de consultas a sus estudiantes que han sido gestionadas a través de los Decanatos y los equipos directivos de las Escuelas Universitarias con el fin de conocer la situación exacta del alumnado para abordar en mejores condiciones la nueva situación.
“Nos preocupa la situación de nuestros estudiantes para afrontar este nuevo escenario de aprendizaje no presencial, y la posible existencia de algunos problemas ocasionados por la carencia de equipos informáticos o acceso a internet”, ha detallado Ana Isabel García, Vicerrectora de Estudiantes y Empleo de la ULE.
En ese escenario de consultas, el alumnado de la ULE, que ha colaborado igualmente con la encuesta de la CRUE, también ha trasladado al Rector y al Vicerrectorado de Estudiantes –bien a título particular o a través de los representantes de estudiantes- su preocupación ante tres tipos de problemáticas: el verse obligados a compartir equipos informáticos con otras personas, la limitación de tarifas de datos lo que dificulta un acceso fluido a las tareas de aprendizaje online y la escasa cobertura móvil de las zonas en las que habitan.
Para solventar estas situaciones Rectorado, Gerencia y Vicerrectorados de Estudiantes y Empleo y de Infraestructuras ya trabajan para tratar de reducir al mínimo impacto estos problemas. Así se está valorando el sistema de préstamo de equipos informáticos y, la opción de una subvención de hasta 40€ para aquellos estudiantes que acrediten una limitación de sus tarifas de datos que efectivamente pueda afectar a su aprendizaje online. Por último, desde esta semana, se están distribuyendo módems USB. Todo un trabajo que tratará de dar respuesta inmediata al alumnado para favorecer su seguimiento académico, facilitar su formación online y asegurar la conclusión del curso.
