La entidad cumple así con las acciones de información de los nuevos recursos asociados desde la fase anterior y la creación e implantación de una imagen turística.
Los asociados a la Ruta del Vino de Rueda en los dieciocho municipios miembros en las provincias de Valladolid y Ávila ya cuentan con su señalética acorde al colectivo gracias a la finalización de la cuarta fase de señalización que completa su plan homónimo para 2016, que se ha ejecutado entre septiembre y enero de 2017. Así, la implantación de esta imagen vinculada al destino turístico contribuirá a asentar e incrementar la actividad turística de la zona, al tiempo que reconocerá al territorio como una región enoturística que es ejemplo de señalización identificativa.
La cuarta fase de señalización de la Ruta del Vino de Rueda, perteneciente a su Plan de Señalización 2016, se ha completado con la homogeneización de los distintivos en los recursos asociados de varios municipios, y los nuevos de la localidad de Castronuño y Mojados, en el periodo comprendido entre septiembre de 2016 y enero de 2017. De esta forma, se consigue poner en valor el potencial de la zona de cara a los turistas, la iniciativa privada asociada a la entidad (empresas), las instituciones públicas y a la comunidad en general.
Las principales acciones realizadas se distribuyen en la actualización de de los planos generales y del municipio de los paneles informativos, la señalización de los nuevos asociados incluidos en las categorías recogidas en el Plan, la señalización de los restaurantes asociados, como nueva categoría admitida en el Plan de Señalización, y el mantenimiento y reparación de señales dañadas.
Para ello se ha empleado un mobiliario que suma un total de63 nuevas señales que se une a las más de 300 ya colocadas en fases anteriores, entre las que se encuentran la placa de membresía -colocada en la entrada de los recursos turísticos-, tótem de entrada al municipio, punto de información y conjunto de señalización direccional.
Los socios que han adquirido dicha señalética en esta fase son los Ayuntamientos de Castronuño y Mojados; los recursos El Gran Cardenal, Vinos y Viandas, Pecado Artesano Panadería Repostería, Restaurante Villa de Ferias, Balneario Palacio de Las Salinas, Zoo La Era de las Aves, Diez Siglos de Verdejo, Campo Eliseo, Restaurante Mesón la Posada de Toño, Restaurante El Bodegón de Nava, Copaboca, Restaurante Alquira, Restaurante Abrasador, Cantagrullas, La Casona de Madrigal, Restaurante Casa Lucio, Restaurante La Botica, Restaurante El Mesón de Pedro, Restaurante El Caballero de Olmedo, Castilla Termal Balneario de Olmedo, Casa Rural Velamora, Restaurante El Cossío y Bodegas y Viñedos Verderrubí.
A través de esta señalética, la Ruta del Vino de Rueda cumple con su objetivo de facilitar el acceso a los visitantes a los recursos promocionados, así como de crear y homogeneizar una imagen turística de destino, ofreciendo la información necesaria mediante señales para contribuir a la percepción necesaria entre los viajeros de encontrarse en una zona vitivinícola con recursos asociados de calidad.
Como ruta certificada dentro del Club de Producto Rutas del Vino de España, la Ruta del Vino de Rueda debe cumplir unos requisitos mínimos de calidad y especificidad exigidos en auditorías externas gestionadas por la Asociación Española de Ciudades del Vino (ACEVIN). Entre estas premisas, destaca la prioridad de información de cara al viajero, de forma que éste pueda vincular y asociar al territorio los recursos patrimoniales, históricos, gastronómicos, de ocio y bienestar, paisajísticos, medioambientales, y culturales, entre otros. Esta función resulta estratégica para los objetivos del Plan Estratégico de la Ruta del Vino de Rueda y de Enoturismo Castilla y León.