Los agentes sorprendieron en la calle Varillas a D.V.G., de 44 años, a quien se atribuye la firma ‘Moloskito’, mientras realizaba una nueva pintada. Llevaba numerosos botes de spray, rotuladores y una agenda con bocetos, entre otros materiales empleados para cometer sus actos vandálicos. Ya se han inventariado decenas de pintadas por toda la ciudad, iniciándose las correspondientes diligencias judiciales.
La Policía Local ha denunciado a uno de los grafiteros más activos de Salamanca, D.V.G., de 44 años, a quien sorprendió cuando efectuaba una pintada en la calle Varillas. Los agentes se encontraban sobre las 7:55 horas desarrollando un operativo de prevención de la delincuencia cuando observaron a un individuo realizando una pintada, por lo que procedieron a su identificación.
El grafitero portaba tres botes de spray; tres botes de tinta para rellenar rotuladores; 62 rotuladores de diferentes tamaños, grosores y boquillas; diez rollos de cinta aislante de distintos tamaños; tijeras quirúrgicas; alicates de punta fina; un par de guantes blancos; dos boquillas adaptadores; una agenda con bocetos de firmas y 18 pegatinas de firmas dispuestas para su uso. La Policía Local requisó el material para evitar nuevas pintadas y ha iniciado las correspondientes diligencias judiciales, con pruebas periciales caligráficas.
La pintada realizada tiene en común la grafía ‘Moloskito’, como otras muchas repartidas por toda la ciudad con la misma tipología y de similares características. En este sentido, la Policía Local ha inventariado ya decenas de pintadas cuya autoría pudiera ser atribuible a este mismo autor en los barrios Garrido, Pizarrales, Blanco, Oeste y en el entorno de la Plaza Mayor. Una cantidad que podría ser mayor, pues en las calles donde los agentes están inventariando pintadas aparece esta firma.
El Ayuntamiento de Salamanca aprobó a comienzos de 2014 la modificación de la Ordenanza Municipal de Limpieza Urbana y Gestión de Residuos para endurecer las sanciones por pintadas vandálicas con el objetivo de disuadir y penalizar más este tipo de comportamientos.
El texto normativo establece que las pintadas en Bienes declarados de Interés Cultural y edificios catalogados en el Plan General de Ordenación Urbana conllevan una infracción muy grave y multa de hasta 3.000 euros.
Las pintadas en los bienes no catalogados, situados tanto en el ámbito de la ciudad histórica y su entorno como en otras zonas de la ciudad, están consideradas como sanciones graves con multas de hasta 1.500 euros..