La intención de la Xunta es retomar primero la actividad en los establecimientos de aquellas rutas que tienen menos oferta de alojamientos privados. La oferta pública se va a complementar con la privada en la segunda quincena del mes, con la previsión de concluir la apertura de la red a principios de julio. La decisión se basa en la progresiva reactivación de las rutas, con la llegada de unos 8.000 peregrinos desde abril.
La Xunta abrirá el 15 de junio casi la mitad de los albergues de la red pública para dar servicio a una demanda creciente de peregrinos en el Camino de Santiago, fruto de una reactivación de las rutas xacobeas a las que llegaron cerca de 8.000 caminantes desde abril, sobre todo a partir del fin del estado de alarma y con la relajación de las restricciones de movilidad.
Si bien a partir de 9 de mayo, con la apertura de los cierres perimetrales en Galicia, los peregrinos fueron poco a poco retornando al Camino, la Xunta decidió no abrir de inmediato los albergues públicos, esperando una mayor afluencia de caminantes, y para no hacerles competencia a los privados, que estuvieron muchos meses sin actividad
Los datos positivos de las últimas semanas aconsejan incrementar los servicios. Frente al mes de febrero, cuando según los datos de la Oficina de Acogida al Peregrino de Santiago de Compostela se entregaron más que 14 compostelas, en el mes de mayo el número de credenciales ascendió a 4.295, y solo en la primera semana de junio se registró la entrega de más de 2.400, lo que confirma la reactivación del Camino y aconseja la progresiva apertura de los albergues.
La intención de la Xunta es abrir antes los albergues de aquellas rutas que tienen menos oferta de alojamientos privados, con la finalidad de seguir compatibilizando los dos modelos. Así, el 15 de junio está previsto retomar la actividad de cinco establecimientos en el Camino Francés, cinco en el Camino Inglés, cuatro en el Camino de Fisterra-Muxía, cuatro en el Camino del Norte, tres en el Camino Primitivo, dos en el Camino Portugués y diez en la Vía de la Plata.
Para el 1 de julio está prevista la apertura de los demás albergues, incluido el del Monte do Gozo (Camino Francés) y el nuevo albergue de Vigo (Camino Portugués de la Costa). Los de Sobrado dos Monxes (Camino del Norte) y Oseira (Vía de la Plata) abrirán cuando finalicen las obras que se están llevando a cabo en los edificios, en tanto que los de Arca y Palas de Rei (Camino Francés) cerrarán provisionalmente en breve porque también van a ser objeto de mejoras.
Ocupación y grupos burbuja
Atendiendo a las últimas recomendaciones del comité clínico que asesora a la Xunta en la desescalada, los albergues de peregrinos mantendrán el límite de ocupación en el 30%, si bien aquellas personas que declaren por escrito que forman parte de un grupo burbuja, podrán compartir habitación.
Los albergues reabrirán con todas las garantías de seguridad y sanitarias para acoger los peregrinos. De hecho, la Xunta invirtió en los últimos meses en la formación de 300 hospitaleros, en la elaboración de guías y en ayudas a los establecimientos para la adecuación de sus locales a las normas sanitarias a las que obliga la pandemia.
La reactivación del Camino viene siendo la constatación de que turistas y peregrinos perciben Galicia como destino seguro, uno de los objetivos que se propuso la Xunta, que confía en el turismo y en el Xacobeo como motor de la recuperación económica de Galicia.