Cuenta con los restos de lo que fue la antigua iglesia de San Miguel, situada sobre un cerro a las afueras del pueblo como anexo al cementerio anexo.
La actual iglesia parroquial de San Miguel se encuentra ubicada en el centro del pueblo. Su origen fue como parroquia de Santa María, posiblemente de época románica, pasando después a ser la ermita de Nuestra Señora de los Remedios, cuando se construyó la antigua iglesia de San Miguel en las afueras del pueblo en el siglo XV.
El edificio es el resultado de las diversas reformas que ha sufrido, como las de 1798 para destinarlo de nuevo a ser parroquia, o las que en años sucesivos afectaron al presbiterio y gradas del altar mayor para lo que se aprovecharon los materiales de las ermitas derruidas que existían en el pueblo, y se rehace la torre y la veleta, quedando entonces destinada a ser el único lugar de culto bajo la nueva advocación de San Miguel. Las últimas reformas son de finales del siglo XX y sirvieron para la reparación de la cubierta. Al trasladar uno de ellos quedaron al descubierto restos de pinturas murales.5
Cuenta con los restos de lo que fue la antigua iglesia de San Miguel, situada sobre un cerro a las afueras del pueblo como anexo al cementerio anexo. Su patronazgo se debió a don Andrés de Grado, conocido como el Doctor Grado, que fue canónigo de la catedral de Zamora y que mandó construir el templo en 1489-1498.