Casa de las Carnicerías acogió la tercera de las nueve actividades promocionales de los vinos D.O. Tierra de León que se desarrollarán todos los viernes, hasta el mes de junio. La actividad tiene como objetivo difundir y promocionar la calidad, singularidad y especiales características organolépticas de los vinos rosados y tintos elaborados con uvas de las variedades autóctonas Mencía y Prieto Picudo. Cada bodega presenta al menos tres vinos certificados por la Denominación de Origen Tierra de León y se reserva la admisión de participantes en la cata por invitación y/o hasta completar el aforo.
León, 28 de abril de 2018. La Casa de las Carnicerías acogió ayer viernes la tercera de las catas de vinos de la D. O. Tierras de León y que se desarrollarán todos los viernes hasta junio, a partir de las 20.00 horas, en la casa de las Carnicerías en la plaza de San Martín, sede oficial de la CEG-2018, y que serán dirigidas por los enólogos o directores técnicos, bajo la organización de las bodegas adheridas al consejo regulador de los vinos de la zona de producción del sur de la provincia.
Esta semana era la bodega Pedro Casis la encargada de ofrecer sus caldos para la degustación a los participantes en la cata.
Esta bodega se ha ido renovando hasta contar en la actualidad con unas instalaciones que aúnan la tradición con las últimas tecnologías en la elaboración de vinos.
Este enólogo y viticultor, con más de cuarenta años de experiencia en el mundo del vino, elabora estos caldos a los que da su nombre siguiendo un estricto control de calidad desde su origen en viñedos propios hasta su presentación en botella, preocupándose de que el consumidor conozca todo el proceso.
La bodega cuenta con dos lagares donde se recepciona la uva procedente de viñedos propios.
La vendimia se realiza cuando la uva está en su punto de maduración óptimo y se recoge seleccionándola manualmente por personal debidamente entrenado para ello no transcurriendo más de dos horas desde que es cortada y llevada al lagar con el fin de que esté en perfectas condiciones fitosanitarias.
Después pasa por un proceso de despalillado para separar las partes herbáceas indeseables en los vinos de calidad y luego fermenta en tanques de acero inoxidable, mediante fermentación controlada.
El vino se estabiliza mediante equipo de frío y micro filtración. Cada botella que sale de la bodega lleva un número de identificación que hace posible poder seguir todo el proceso.
Los cuadros de las etiquetas han sido escogidos en función de los colores y olores que evocan y son pinturas originales del joven pintor leonés Francisco Suárez.
La de hoy no fue una cata al uso, sino que trató de ser una experiencia de los sentidos. Comenzó la presentación con la intervención de Silvia, profesora de yoga, para intentar despertar los sentidos de los asistentes, antes de comenzar la cata y disfrutar de una experiencia. La cata consistió en la degustación de tres vinos.
El primero un vino rosado de Prieto Picudo de 2017, a continuación se paso a degustar un Crianza de Mencía, para terminar con un Casis Gran Reserva de la añada de 2005, con cinco años en barrica. Un vino que ha nacido acompañado por los poemas de Antonio Colinas, que acompaña a este Gran Reserva Casis. Casis Gran Reserva es una edición limitada de 2000 botellas numeradas
En la degustación de los caldos participó la federación de sumilleres. Para el próximo viernes 4 de mayo la cita será con la bodega Cien Cepas de Corbillos de los Oteros, el 18 de mayo con Gordonzello (Gordoncillo), el 25 con Leyenda del Páramo (Valdevimbre) y el 8 de junio con Pardevalles (Valdevimbre).
El 15 de junio se cerrará la serie con los vinos de la cooperativa Ribera del Cea (Valderas). El consejo regulador prevé programar una segunda serie de catas a lo largo del último trimestre de la capitalidad.