La Casa de las Carnicerías acogió una primera serie de nueve actividades promocionales de los vinos D.O. Tierra de León que se desarrollarán los viernes, hasta el mes de junio
La Casa de las Canicerías acogió ayer la primera cata de vinos de la D. O.Tierras de León, actividad esta que es la primera de las 9 previstas y que se desarrollarán los viernes, a partir de las 20.00 horas, en la casa de las Carnicerías en la plaza de San Martín, sede oficial de la CEG-2018, y que serán dirigidas por los enólogos o directores técnicos, bajo la organización de las bodegas adheridas al consejo regulador de los vinos de la zona de producción del sur de la provincia.
La actividad tiene como objetivo difundir y promocionar la calidad, singularidad y especiales características organolépticas de los vinos blancos, rosados y tintos elaborados con uvas de las variedades autóctonas Albarín y Prieto Picudo. Cada bodega podrá presentar al manos tres vinos certificados por la Denominación de Origen Tierra de León y se reserva la admisión de participantes en la cata por invitación y/o hasta completar el aforoValencia de Don Juan, 12 de abril de 2018.
Dicho esto la Denominación de Origen Tierra de León afrontó ayer 13 de abril, la primera de una serie de nueve catas de vinos programadas hasta el mes de junio dentro de las actividades de León, Capital Española de la Gastronomía-2018 y del plan de promoción agroalimentario
El programa lo abrió la bodega Tampesta-Andrés Marcos (Valdevimbre). Estos son unos vinos hechos con carácter y pasión en la comarca de Valdevimbre-Los Oteros. Con variedades de uva local Prieto Picudo, Albarín y Tempranillo, y denominación de Origen Tierra de León.
Se funda Bodegas Tampesta en el año 2000, apostando por la tradición vitivinícola de la zona de Valdevimbre, al sur de la provincia de León. Es aquí donde se encuentra la mayor plantación de viñedo de la variedad autóctona de Prieto Picudo, que monopoliza la imagen y señas de identidad de los vinos acogidos a la D.O. Tierra de León.
Dicha variedad se distingue por su racimo apretado y sus uvas en forma de piñones, de piel negra azulada; de una expresividad frutal tan intensa que parece una fragancia en la viña. Esta variedad nos da vinos con mucha estructura, cubiertos, concentrados y muy aromáticos como pudieron apreciar todos los participantes en esta cata.
Para el próximo viernes 20 de abril la cita será con Vinos de León-Vile (Fresnellino del Monte) y el 27 con Pedro Casis (Gordaliza del Pino); el 4 de mayo con Cien Cepas (Corbillos de los Oteros), el 18 con Gordonzello (Gordoncillo), el 25 con Leyenda del Páramo (Valdevimbre) y el 8 de junio con Pardevalles (Valdevimbre).
El 15 de junio se cerrará la serie con los vinos de la cooperativa Ribera del Cea (Valderas). El consejo regulador prevé programar una segunda serie de catas a lo largo del último trimestre de la capitalidad