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La capilla del Cementerio de Zamora estrena renovación en Todos los Santos

El retablo central y las pilastras de madera del pórtico sufrían un grave deterioro a causa de las termitas

web Capilla Cementerio ZamoraLa capilla del Cementerio estrena para la festividad de Todos los Santos un aspecto  renovado después de los trabajos de restauración llevados a cabo por el Ayuntamiento en el retablo central y las pilastras interiores de madera del pórtico que se encontraban considerablemente deterioradas debido al ataque de las termitas. Aprovechando esta intervención se ha procedido también a una limpieza y adecuación general tanto del interior de la capilla como de la sacristía.

El retablo mayor es una obra dieciochesca en madera tallada y dorada, con una gran hornacina central que aloja una talla en madera policromada de San Atilano, flanqueado por dos columnas y una profusa decoración tallada también en madera, que asciende hacia el ático que contiene un lienzo policromado en el que se representa en martirio de San Vicente. El pórtico de la entrada, situado como remate del interior de la puerta de acceso representa una fingida arquitectura de aire neoclásico, compuesto por sendas pilastras y cornisa corrida en madera policromada y parcialmente dorada, que data en este caso del siglo XIX. Ambos elementos se encontraban gravemente afectado por las termitas, de tal forma que algunas de sus partes amenazaba ruina inminente y una de las columnas laterales del retablo central estaba a punto de desprenderse, lo que podía ocasionar el derrumbe de todo el conjunto.

En el caso del retablo, debido al grave estado que presentaban todos sus elementos, ha sido necesaria la reparación desde el solado y la tarima sobre la que se asienta, afectada también por las  termitas, por lo que ha sido necesaria  la eliminación de la moqueta y el tablero de la base, y la dotación de un nuevo asiento con encofrado de hormigón y termoarcilla.  Se desmontaron algunas de las piezas susceptibles de ser apeadas, como la imagen de San Atilano, el lienzo superior y el ático; se realizó la consolidación interna de la madera afectada, mediante coladas de impregnación de resina acrílica y microesferas huecas de vidrio. y se procedió al ajuste y colocación del as piezas desprendidas de la estructura por el ataque de las termitas. Para finalizar se aplicó un protector interior para la renovación del cromado superficial.

Las pilastras del pórtico tuvieron que ser desmontadas para acometer también un tratamiento interior contra las termitas, y proceder posteriormente al estucado de las mismas y la reintegración cromática. Además fue necesaria la creación de un nuevo asiento para las columnas a bases de bloques de madera, debido al grave deterioro que presentaba el asiento original.

La intervención se ha llevado a cabo por personal especializado, bajo la dirección y supervisión de los técnicos municipales, y ha tenido un coste de 16.750 euros.

 

La nueva Cruz de Coomonte en el Cementerio, un ejemplo de tolerancia, respeto y armonía

Una cruz de hierro que viene a sustituir a la anterior de hormigón que tuvo que ser derribada debido a su mal estado

web Cruz Coomente Este pasado 22 de octubre tuvo lugar la instalación del nuevo monumento en forma de Cruz del escultor José Luis Alonso Coomonte en el Cementerio municipal, después de que haya sido necesaria la retirada de la anterior cruz por su mal estado y riesgo de derrumbe. Se trata de una cruz metálica de seis metros de altura y 700 kilos de peso, reforzada en su base y cuatro lágrimas de cristal en el crucero sobre elementos de forja.

No se trata realmente de una nueva cruz, sino la sustitución de la que ya existía y que tuvo que ser derribada hace meses por motivos de seguridad ya que se encontraba en estado deplorable, y que se ha encargado a un escultor zamorano de reconocido prestigio, como es Coomonte, con un presupuesto de 18.000 euros. El acto de colocación, sobre la misma base granítica de la anterior, ha tenido lugar esta mañana y ha contado con la presencia del alcalde, Francisco Guarido, la concejala del Cementerio, Carmen Turiel, y el propio escultor.

El alcalde ha querido responder a algunas opiniones vertidas recientemente en las redes sociales sobre la representatividad de este monumentos, asegurando que la nueva instalación representa “lo que es, una obra de arte puesta en un sitio como es el cementerio, que es un sitio de todos los zamoranos porque, tarde o temprano, todos acabaremos aquí”. Guarido afirmó que esta instalación no tiene ningún significado parcial sino que es un acto de absoluto respeto y tolerancia que tiene el equipo de gobierno municipal por todas las ideologías y todas las creencias, “y eso lo dice un alcalde que se considera agnóstico pero que debe gobernar para todos”.

De hecho, el  propio Cementerio Municipal es un ejemplo de ello, porque también se han construido tumbas para los que  profesan la religión musulmana, se va a reformar próximamente el Osario donde se instalará algún elemento simbólico que represente el daño que sufrieron los fusilados de la guerra civil, existe un “rincón blanco” para la inhumación de los restos de nonatos, y se ha rehabilitado el retablo de la capilla que se encontraba muy afectado por la carcoma. Por todo ello el alcalde considera que “este es el Cementerio de todos, el equipo de gobierno de todos; por lo que no se excluye a nadie y hay que dar ejemplo de tolerancia, de respeto y de armonía, que es el sentido final de lo que significa esta cruz”.

El propio escultor considera que no debe considerarse un elemento estrictamente religioso porque “todas las cruces son de los ausentes, de todos los ausentes, sean cristianos o no sean cristianos”, como sucede también en las tumbas donde en muchas ocasiones están enterradas personas no creyentes. Para el propio Coomonte, que ha realizado muchas cruces a lo largo de su dilatada vida, es también un elemento escultórico que representa la verticalidad en el espacio, propia del estilo gótico y la horizontalidad del románico “y aquí la cruz nos representa a todos, sin revancha de ningún tipo, porque aquí somos todos  iguales”.

Y sobre el cambio de elementos del hormigón al hierro, Coomoente aseguró que era absolutamente necesario sustituir la cruz anterior, que era de hormigón, porque con la humedad las varillas de la estructura interior se habían oxidado y algunas se rompieron; tal como le ha sucedido a él mismo con algunas esculturas realizadas también en hormigón, como “la sirena varada” instalada bajo un puente en Madrid, y dos desnudos “que se me han roto, por lo que tendré que hacerlos de nuevo”.

Fecha de inicio: 01-11-2021

Fecha fín: 01-11-2021

Lugar: cementerio de zamora
zamora

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