Desde IU afirman que la solución de la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento parece una broma de mal gusto.
La reforma de la estación de autobuses se está realizando desde hace un tiempo y, en un alarde de falta de previsión por parte de las instituciones implicadas, no se ha tenido en cuenta la importante necesidad de crear una unión entre ambas estaciones para los usuarios de las mismas. La fórmula propuesta, y para la cual, La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de León ha dado el visto bueno, se les ha ocurrido, cuando llevan ya varios meses de obras.
Carmen Franganillo, coordinadora local de Izquierda Unida pide al Ayuntamiento y a José Antonio Díez, que hagan frente a la Junta y a sus ocurrencias y “dejen de aceptar todo lo que desde allí les proponen”.
La idea de poner una marquesina a la acera que une ambas estaciones es tachada por Izquierda Unida como una” burla a la ciudadanía leonesa” que, además, “quitará plazas de aparcamiento y acera para el tránsito peatonal a los vecinos de la zona.”
Por ello, desde Izquierda Unida proponen que la Junta y el Ayuntamiento se pongan de acuerdo a la hora de unir ambas estaciones con una pasarela, cerrada y elevada, desde la planta superior de la estación de autobuses, que pase por encima del aparcamiento situado entre la calle y las vías del ferrocarril hasta la estación de Renfe, solucionando los accesos con escaleras mecánicas y ascensores, tomando ejemplo de lo existente en otras situaciones semejantes.