La exposición ofrece un recorrido por la creación contemporánea vinculada con la provincia, a través de las colecciones del Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León (MUSAC) y del Museo de Zamora.
Castilla y León | 31 de diciembre de 2020. El viceconsejero de Cultura, Raúl Fernández Sobrino, ha visitado ayer en el Museo de Zamora la exposicion ‚´Tensión y equilibrio. Seis artistas entre el MUSAC y el Museo de Zamora‘, proyecto que impulsa la Junta de Castilla y León entre sus iniciativas para apoyar al sector cultural de la Comunidad, en los momentos actuales de crisis sanitaria y social.
La muestra propone un recorrido por la creación contemporánea vinculada con Zamora, a través de las colecciones del Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León (MUSAC) y del Museo de Zamora y establece, a partir del trabajo de Delhy Tejero, referente común para los dos centros museísticos, diversas conexiones con obras de Toño Barreiro, José Luis Coomonte, Baltasar Lobo, Ana Prada y Concha Prada, seis artistas que comparten origen y que profundizan en la disciplina artística de diversas maneras y con distintos enfoques. Sus afinidades y contrastes estéticos, sus tensiones y equilibrios se presentan como una oportunidad de establecer un diálogo entre sí, creándose nuevas aproximaciones a las obras, a partir de un juego visual y textual.
La muestra da continuidad a la presencia del arte contemporáneo en la programación del Museo de Zamora, una seña de identidad del centro desde su reapertura en 1998, y manifiesta su interés y compromiso con el contexto artístico más actual, reflejados en una trayectoria que durante más de veinte años ha unido la acogida de proyectos pertenecientes al ya desaparecido programa Constelación Arte, con la realización de exhibiciones propias, colectivas como‚ ´La mirada a estratos‘ (2003), conjuntas como ´Hazme un sitio en tu montura´ (2016) o individuales como ´Coomonte. El dibujo infatigable´ (2017) o ´Mosaico romano: 13 variaciones. Rufo Criado´ (2017).
En esta ocasión, una nueva propuesta colectiva reúne a seis artistas entre dos siglos y permite enlazar dos importantes colecciones museísticas de Castilla y León, la del MUSAC y la del Museo de Zamora.