La compañía anuncia el cambio de marca de Meliá de Mar (Illetas, Mallorca), que será reconvertido en un hotel de lujo Gran Meliá con una inversión superior a €3 millones.
Meliá Hotels International ha anunciado hoy un proyecto para la transformación de su emblemático hotel Meliá de Mar, ubicado en Illetas (Mallorca), que a partir de la próxima temporada será operado bajo la marca premium Gran Meliá. La Compañía sigue así una estrategia para mejorar su posicionamiento en el segmento lujo, como acaba de demostrar con el reciente anuncio de reforma de un hotel en el centro de Madrid (el Gran Meliá Palacio de los Duques).
El grupo de origen mallorquín, que en 2016 celebra su 60 aniversario, vuelve a dar un espaldarazo a su tierra natal. Para Gabriel Escarrer, Vicepresidente y Consejero Delegado de Meliá Hotels International, “nuestro futuro como Compañía, y Mallorca como destino, viene marcado por la innovación y la diferenciación. Un hotel emblemático como es Gran Meliá de Mar nos ayudará a reforzar el reconocimiento de nuestra marca y a diferenciar el destino en el segmento alto y premium en un entorno cada vez más competitivo”.
El hotel, a tan solo 10 minutos de Palma, es uno de los más carismáticos de Mallorca. Diseñado por el prestigioso arquitecto José Antonio Coderch, fue totalmente reformado en 2008, y sigue siendo considerado uno de los mejores ejemplos de la arquitectura moderna en las Islas Baleares. El edificio se alza frente a una idílica cala privada en Illetas, en el municipio de Calviá, con una elegancia única que ha sobrevivido a los años. En 2009, se transformó en hotel “solo para adultos” en un esfuerzo de mejorar su propuesta de valor y exclusividad a través de sofisticados servicios, instalaciones y experiencias, así como una atención más personalizada para satisfacer la exigencia del público adulto.
En la temporada 2016, el hotel, de 144 habitaciones, abrirá sus puertas como el nuevo Gran Meliá de Mar, tras completarse una serie de reformas que pretenden elevar la calidad de sus habitaciones y de sus instalaciones exteriores, como las áreas de piscina y terrazas, además de crearse algunos de los atributos característicos de la marca, como el Red Level Lounge. Asimismo, una de las transformaciones más importantes será precisamente la adopción de los estándares de servicio de Gran Meliá, basados en el lujo tradicional e incorporando toques de vanguardia como elemento diferenciador clave de la marca. Esta cultura de servicio, llamada Red Glove Service, es la que asegura la experiencia de lujo personalizada al cliente.
El hotel incorporará también nuevo equipamiento tecnológico, como televisiones de última generación, y convertirá su actual spa en el nuevo Spa by Clarins, gracias al acuerdo exclusivo de Gran Meliá con la firma de cosméticos. El hotel seguirá ofreciendo una experiencia gourmet a sus clientes a través de sus dos restaurantes, además de contar con una propuesta de coctelería de máximo nivel, y mejorará sus espacios destinados a reuniones y eventos, con un total de seis salas, la mayoría con luz natural.