Gradefes acogió ayer sábado 18 de agosto la III Feria del dulce de convento con la participación de 27 conventos de toda España.
La feria tuvo lugar ayer sábado 18 de agosto en el monasterio cisterciense de Santa María la Real, uno de los edificios románicos más emblemáticos y mejor conservados de la provincia leonesa. Una comunidad de monjas mantiene vivo el espíritu religioso fundaciónal, al mismo tiempo que elaboran dulces de forma tradicional.
Son innumerables las dulces delicias que se elaboran en conventos y monasterios.
Pero en todas las recetas de esos dulces hay un elemento común, salvaguardar la tradición utilizando ingredientes naturales y productos de primerísima calidad.
Gracias al trabajo artesanal de las religiosas que se materializa en una variada gama de productos como son: los amarguillos, coquitos, suspiros, naranjines, almendrados, retorcidos, feos, rosquillas, magdalenas, almendras garrapiñadas y diversos tipos de pastas: de té, nata, almendra, chocolate,queso…, los consumidores pueden disfrutar de sabores de antaño.
Para ello varios stands se instalaron en torno al monasterio para ofrecer estos deliciosos productos artesanales de los 27 monasterios participantes, habiendo una nutrida representación de los monasterios del Reino de León, tales como Toral de los Guzmanes, Sahagún, Cantalapiedra, Alba de Tormes, Zamora, Benavente, Toro o de las propias monjas de Gradefes.
Cabe destacar tanto la cuidada puesta en escena por parte del Ayuntamiento de Gradefes como el éxito de publico asistente a la feria. Y como anécdota decir que resultó simpático que las neveras fueran de cerveza «San Miguel»