Free City en León el 2 de noviembre

Su música les ha llevado a tocar en festivales como el Resurrection Fest, Tsunami Xixón, Viña Rock, Shikillo Festival, etc….

Free City lanzó “Ingravidez” el pasado mes de mayo de 2024. Este disco ha sido grabado por Eñaut Gaztañaga (guitarrista de la banda vasca Ezpalak) y cuenta con un sonido mucho más natural y ambiental que sus anteriores trabajos, sin perder la agresividad y contundencia que caracteriza a la formación pucelana.

“Ingravidez” es el nuevo disco de Free City. El sexto en la discografía del grupo vallisoletano, quienes por méritos propios en la última década se han convertido en una de las realidades más afianzadas y esperanzadoras del panorama del punk, del rock y del hardcore a nivel nacional. Un quinteto que no deja de trabajar incansablemente con la ilusión propia de quien factura su primer o segundo disco. Algo que ha marcado la trayectoria de la banda desde sus inicios.

En esta ocasión, y por primera vez, el quinteto se trasladó a Zestoa para grabar este nuevo disco en los Gaztain Estudioak bajo los mandos de Eñaut Gaztañaga (ahora también guitarrista de Ezpalak). Los de Pucela han dado un nuevo giro a su sonido manteniendo la base de personalidad que les ha hecho ir sumando miles de fans por todo el país a lo largo de su trayectoria. Para ellos, una de las experiencias creativas más enriquecedoras que han vivido hasta ahora.

Estamos ante el disco más heterogéneo hasta la fecha de Free City. Los niños, ahora adultos, han recogido las influencias con las que han ido evolucionando a lo largo de los años. Juegan con ellas con una ingravidez con la que las hacen propias y generan unos Free City fieles a su trayectoria pero que siguen aportando y apostando. Como sólo una banda arriesgada avanza: con el cuchillo entre los dientes.

Así, podemos encontrar frases cercanas al emo, armonías que te trasladan a los Judas Priest de los 80, contundencia rítmica del hardcore punk propios de la casa (y que recuerdan incluso al NY Hardcore cuando las guitarras pisan fuerte la distorsión)… pero también hay influencias latinas en ritmos, hay arreglos propios de las nuevas bandas inglesas del hardcore de orillas de Bristol… . Todo impregnado de su propia personalidad que hace este disco una mezcla homogénea que absorbe y te hace viajar a tal velocidad que la reproducción del álbum pasa volando.

En el aspecto de las letras, en la extrema sensibilidad propia de la casa, como podemos escuchar en cortes como “Burbuja Dorada”, “Tus Armas” o “Zénit”, las partes más sensibles del disco, es donde llegan a un nivel más maduro y dónde se huye conscientemente de clichés propios del estilo y la escena.

Por otro lado, es en canciones como “Pastillas y Gasolina” (primer single del álbum) o en “Puntos de Sutura” donde vemos el mayor reflejo de lo que son Free City hoy. Una máquina ajustada para cantarle a la vida con pesimismo y belleza, potencia y delicadeza. Para hacer un disco destinado a marcar a una generación de amantes del rock en este país. Parece que estas canciones hayan sido grabadas en esa cima de la que hablan en el citado primer single y sin experimentar el arrepentimiento del que hablan en los siguientes versos.

El tiempo, los directos y la constancia de una banda incansable les colocará en el lugar que se merecen. Permanezcan atentos porque “Ingravidez” es uno de los discos nacionales del año.