En 1970, el antiguo municipio de San Marcial se integró en el de El Perdigón, haciendo lo propio el de Tardobispo en 1976.
Este municipio está formado por las localidades de El Perdigón, San Marcial y Tardobispo, la primera de ellas como cabecera municipal. El municipio es especialmente conocido por sus numerosas bodegas subterráneas, algunas de ellas abiertas al público como bares o restaurantes.
La iglesia parroquial de San Félix alberga en su interior el valioso sepulcro del chantre Pedro López de Peralta y un notable conjunto de tablas góticas.
Durante la Edad Media la localidad quedó integrada en el Reino de León, siendo repoblada por sus monarcas.
Posteriormente, El Perdigón estuvo muy ligado a la figura del Vizconde de Garcigrande, Pedro López de Peralta, que posee una capilla en la iglesia fundada en 1520.7 En esta época, y a lo largo de toda la Edad Moderna, la localidad formó parte del Partido del Vino de la provincia de Zamora, tal y como reflejaba en 1773 Tomás López en Mapa de la Provincia de Zamora.
A lo largo de los siglos XIX y XX El Perdigón tuvo un carácter industrial, propiciado por la presencia de la vía de ferrocarril que unía Zamora y Salamanca, hoy fuera de uso. En la actualidad aún se mantiene una fábrica de aguardientes y otra de cerámica. Finalmente, en 1970, el antiguo municipio de San Marcial se integró en el de El Perdigón, haciendo lo propio el de Tardobispo en 1976.
Que ver y que hacer
La iglesia parroquial de San Félix está datada en el siglo xvi, y guarda en su interior un destacado retablo mayor barroco conformado por 17 tablas góticas de buena factura.
Hay también un sepulcro renacentista y una capilla que acoge al chantre Pedro López de Peralta. Popularmente se le conoce como El Conde, aunque fuera en realidad Vizconde de Garcigrande, siendo su capilla fundada en 1520. Hay también en el templo un friso con una inscripción gótica del XV, así como una imagen de madera de La Virgen del XVI. El retablo de la capilla es de estilo alemán, del siglo xv.
Sin duda lo que más fama da al pueblo son sus bodegas, unas de las más conocidas y numerosas de la comarca de la Tierra del Vino. Algunas de ellas además están abiertas al público como bares o restaurantes. Existen varias casas blasonadas y de bellas fachadas de piedra en el pueblo.
Gastronomía
En esta localidad las especialidades a la brasa encabezan los menús de las numerosas bodegas: churrasco, chuletillas de cordero, solomillos y chuletas conviven con embutidos y con productos en general derivados de la matanza del cerdo y vinos de la tierra.