El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, destacó ayer la importancia que el “turismo espiritual” tiene para el sector y para la región en general.
En este sentido, ha afirmado que en el futuro habrá una especial motivación a la hora de que las personas viajen, “se viajará para o por algo”, teniendo en esta forma de viajar el turismo vinculado a la religión una gran transcendencia.
Además, ha añadido que en esta línea se está trabajando desde hace tiempo en Extremadura y espera seguir avanzando porque se puede ofrecer “un enorme patrimonio a todos aquellos que lo quieran contemplar”.
“Para una región como Extremadura disponer de cinco catedrales y concatedrales más dos monasterios como el de Yuste y Guadalupe significa un patrimonio vinculado con lo espiritual que hace de ese tipo de turismo algo enormemente y extraordinariamente importante”, ha continuado el presidente.
Durante su visita a la catedral de Coria –tras las obras de restauración que se han llevado a cabo en la misma, a la que también ha asistido la consejera de Cultura, Turismo y Deportes, Nuria Flores– el presidente de la Junta de Extremadura ha defendido la importancia de la historia, entre otros motivos, para que “nos demos cuenta de lo que aquí se ha descubierto”, como son parte de la primitiva catedral de Coria del siglo XIII y que introduce un elemento más de atractivo y de encanto para la ciudad.
En relación con lo anterior, ha indicado que si las catedrales son importantes para todas las ciudades donde se ubican, para una ciudad como Coria tiene una especial relevancia por las propias características y por la propia inmensidad de la catedral.