El Nacional de Escultura ha inaugurado una exposición en torno a uno de los grandes: Alonso Berruguete La muestra servirá para poner de manifiesto una nueva faceta del famoso escultor del Renacimiento: su capacidad para contagiarse del mundo de la Antigüedad.
Valladolid, 16 de julio de 2017: Italia y luz son dos términos cargados de significado para hablar del escultor español de mayor éxito internacional y una de las figuras más singulares de nuestra historia en toda Europa: Alonso Berruguete (c. 1489-1561). El Museo Nacional de Escultura de Valladolid organiza una exposición que lleva por título «Hijo del Laocoonte. Alonso Berruguete y la Antigüedad pagana», cuyo comisario es Manuel Arias Martínez, subdirector de la institución y uno de los principales investigadores sobre este artista y su tiempo.
La muestra tiene por objeto reflexionar sobre la figura de un artista esencial del Renacimiento, Alonso Berruguete, en su papel como puente con las novedades que se estaban fraguando en Italia, en la época en que Miguel Ángel había esculpido su David y afrontaba la decoración de la bóveda de la Capilla Sixtina, y cuando acababa de ser descubierto el célebre grupo del Lacoonte. Por lo tanto y, aunque centrada en la obra de Alonso Berruguete, la exposición reúne esculturas, pinturas, dibujos y grabados de grandes maestros, muchos de ellos representados en las colecciones del Museo, y otras muchas procedentes de grandes colecciones y museos nacionales y extranjeros (Museo Arqueológico Nacional, Museo del Prado, Galería Uffizi, Museo Marés de Barcelona…), que ayudan a construir su universo de formas e influencias.
El Museo Nacional de Escultura, perteneciente a la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, organiza esta exposición y ha logrado contar con el patrocinio del Centro de Estudios Europa Hispánica, la Asociación de Amigos del Museo Nacional de Escultura, el Ayuntamiento de Valladolid y las empresas Prosol Productos Solubles y Europac Group.
La colaboración institucional también se ha puesto de manifiesto en las labores de restauración que están llevando a cabo los técnicos del Museo Nacional de Escultura y del Instituto de Restauración del Patrimonio de la Junta de Castilla y León en el retablo de la Adoración de los Magos de la iglesia de Santiago de Valladolid.
«Hijo del Laocoonte. Alonso Berruguete y la Antigüedad pagana» se muestra en el Museo Nacional de Escultura de Valladolid, en su sede de exposiciones temporales situada en el Palacio de Villena, desde principios de julio a noviembre de 2017. La exposición se acompañará de un catálogo, con textos y ensayos de especialistas, así como un programa de actividades (música, conferencias, visitas guiadas, cine…) que ayudará a completarla.
Principales atractivos de la exposición
Es la presentación por primera vez en España del arte escultórico de Alonso Berruguete en su contexto, el período más espléndido en la civilización europea que se caracterizó por una oleada de interés por la erudición y los valores de la Antigüedad Clásica.
Berruguete importa de Italia la imagen del artista total, el arquitecto, el escultor, el pintor, el dibujante, que entiende el arte como un todo y funde todas estas disciplinas en sus obras.
La exposición se construye sobre una coral de obras que ayudan a interpretar la escultura de Berruguete, dispersas en museos nacionales y extranjeros de Italia y España. Su presentación en el Museo Nacional de Escultura, poseedor de la mejor colección de berruguetes del mundo, ofrece una ocasión irrepetible.
La escultura de Berruguete ha estado siempre asociada al arte de temática religiosa. Su vinculación a las fuentes paganas ayudará a entender el Renacimiento como un momento de diálogo y permeabilidad entre dos culturas, con Roma como principal escenario.
La exposición es una ocasión para confrontar formas que se repiten a lo largo de la historia. Berruguete era un verdadero devorador de modelos del arte clásico, que después reinterpretaba para formular su propio lenguaje, completamente genuino.
En un plano más amplio, la exposición pone de manifiesto la existencia de una serie de artistas singulares en la Historia del Arte, verdaderos unicum que trascienden su tiempo y su lugar de origen, marcados por un cosmopolitismo que les lleva a impregnarse y enriquecerse de todo cuanto les rodea.
Se ha editando un catálogo en el que participan especialistas destacados como: Manuel Arias (Museo Nacional de Escultura), Miguel Morán (UCM), Carlos Morán (CSIC Mérida), Vincenzo Farinella (Universidad de Pisa), Tommaso Mozzati (Universidad de Perugia).
Alonso Berruguete, hijo del Laocoonte
Oriundos de la localidad palentina de Paredes de Nava, Alonso fue el hijo mayor del famoso pintor Pedro Berruguete. El fallecimiento temprano de su padre, provocó que emprendiera su carrera formativa vinculada a la profesión paterna, pero con aspiraciones que le llevaron a abandonar su patria. Es en ese contexto de relaciones internacionales, de viajes de estudio y de contacto, en el que se detecta la presencia italiana de Alonso Berruguete, primero en Roma y después en Florencia, transformando por completo su carácter de artista local, para dotarlo de una dimensión especial.
En 1508 el propio Miguel Ángel lo sitúa en Italia, cuando recomendaba a un joven español, identificado con él, para que se le facilitara el estudio del cartón de su célebre Batalla de Cascina, custodiada en Florencia. Su posterior participación en el concurso para realizar una copia del célebre grupo del Laocoonte, que había sido descubierto en 1506, le sitúa en compañía de futuros renombrados escultores, como Jacopo Sansovino, en uno de los grandes acontecimientos de la época.
Las peculiaridades formales y estilísticas de Berruguete le confieren un carácter de especial expresión personal en la disciplina escultórica, pero también pictórica, arriesgando en favor de soluciones que rompían con la tradición hispánica, con unas novedades transmutadas de las fuentes italianas de la Antigüedad y de los grandes maestros en las que el escultor había bebido durante largos años.
El Museo Nacional de Escultura posee la mejor colección de berruguetes del mundo, obras procedentes del desamortizado Monasterio de San Benito el Real o del Monasterio de Ntra. Sra. de la Mejorada de Olmedo, en Valladolid.
Fecha de inicio: 05-07-2017
Fecha fín: 05-11-2017
Lugar: Museo Nacional de Escultura. Palacio de Villena. Valladolid
C/ Cadenas de San Gregorio - 47011 Valladolid (España)
Tlfno.: 00 34 983 250 375