El seminario ´Instalaciones siderúrgicas contemporáneas a la Ferrería de San Blas repasa la historia de otras grandes industrias del siglo XIX en España.
A mediados del siglo XIX se ponía en marcha en la localidad leonesa de Sabero la primera industria siderúrgica moderna del país, con hornos altos al cok y la tecnología al vapor más avanzada del momento. La Sociedad Palentina Leonesa de Minas, detrás de la que estaban los principales hombres de negocios de España, así como los técnicos más eminentes, levantaba las instalaciones de la Ferrería de San Blas, con la idea de cubrir una demanda cada vez más creciente producto del avance del ferrocarril y la traída de agua a las ciudades.
La Ferrería de San Blas cogía el testigo de otras siderurgias que hasta la fecha venían funcionando en España, con una tecnología más antigua basada en la combustión del carbón vegetal en los hornos altos.
El Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León, con sede en Sabero (León) organiza el seminario ‘Instalaciones siderúrgicas contemporáneas a la Ferrería de San Blas’ con el objetivo de dar a conocer estas industrias y otras similares y su relación con la fábrica de Sabero.
El seminario, comienza en septiembre con una ponencia sobre la historia de la Fábrica Nacional de Artillería de Trubia, continúa en octubre abordando la historia de las ferrerías malagueñas y finaliza en noviembre con una sesión sobre la Fábrica siderometalúrgica de la Duro en La Felguera.
La primera sesión, dedicada a esta conocida industria asturiana, será impartida por el geógrafo Antonio Huerta, autor del libro ‘Trubia 1874 – 1930. El desarrollo socioeconómico y espacial de Trubia bajo la influencia de la Fábrica de Armas’, cuya familia está ligada a esta fábrica desde hace un centenar de años.
A finales del siglo XVIII, España declaró la guerra a la Francia revolucionaria, esta guerra discurrió de forma desastrosa para España, que se vio obligada a firmar la Paz de Basilea el 22 de julio de 1795. El gobierno de España temió perder los territorios próximos a la frontera francesa. Las fábricas navarras de Eugui y Orbaiceta habían sido asediadas y asaltadas. Por ello,eligió un lugar alejado de la frontera para instalar una industria militar con el objetivo de atender las necesidades de material bélico del Ejército español y de la Armada Real. Situando finalmente esta fábrica en Trubia.
Trubia se convirtió así en un pueblo muy distinto de los del resto de España, pues en pleno siglo XIX, contaba con Teatro, Casino, Escuela de idiomas, Coral polifónica y Banda de Música.
La Primera guerra mundial le dio un nuevo impulso, con la consiguiente construcción de nuevos talleres, edificios administrativos. Fue la mejor época de Trubia.Ya en los años 50 la fábrica entra en un imparable declive.
La actividad es gratuita, y tendrá lugar el sábado 25 de septiembre a las 12:00 h. La inscripción se puede realizar en el museo o en el teléfono 987 718 357, con las plazas limitadas y siguiendo la normativa Covid19.