Revilla anuncia la noticia a su tataranieto y actual soberano, el príncipe Alberto II, en su segunda visita oficial a la Comunidad Autónoma.
El futuro Centro de Arte Rupestre de Cantabria llevará el nombre de ‘Alberto I de Mónaco’ en reconocimiento a su labor de mecenazgo en el estudio de las cuevas del Monte Castillo a principios del siglo XX. Así se lo ha anunciado el presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, a su tataranieto y actual soberano del Principado, Alberto II, en el transcurso de su segunda visita oficial a la Comunidad Autónoma (la primera fue en 2010), ocasión que ha aprovechado para conocer los detalles de este proyecto cultural del Gobierno de Cantabria que cuenta con un presupuesto de 5 millones de euros y abrirá sus puertas en 2023 en Puente Viesgo.
Revilla ha destacado la importancia para la Comunidad Autónoma de la figura de Alberto I no sólo porque financió “proyectos emblemáticos de la historia de la Humanidad” como las cuevas del Monte Castillo, sino porque fue uno de los primeros en hablar de la región de Cantabria en el libro ‘Les cavernes de la région Cantabrique’.
“Este hombre entusiasta de la arqueología y la investigación puso en el mapa del mundo a las cuevas y a Cantabria”, ha apuntado el presidente cántabro.
Miguel Ángel Revilla ha mostrado su satisfacción por recibir de nuevo en la Comunidad a Alberto II y le ha invitado a asistir a la inauguración del Centro de Arte Rupestre, prevista para la próxima primavera. “Bienvenido a Cantabria. Es un placer y un honor tenerle por segunda vez. Aquí se le quiere y su abuelo fue un referente muy importante para nosotros”, ha concluido.
Por su parte, el príncipe ha agradecido el gesto de Cantabria con su familia –“es un gran honor y una gran felicidad. Os lo agradezco infinitamente”- y ha aceptado la invitación del presidente al acto inaugural: “Lo esperamos todos dentro de unos meses y, si el tiempo lo permite, estaría muy feliz de volver para esta inauguración”, ha dicho.
El soberano del Principado ha recordado el interés de su tatarabuelo por las ciencias y por el origen de la Humanidad y ha felicitado a Cantabria por la puesta en marcha de este proyecto cultural y también por los nuevos descubrimientos e investigaciones en las cuevas del Monte Castillo, que posteriormente ha conocido ‘in situ’.
“Soy muy feliz de estar aquí hoy. Muchísimas gracias por la hospitalidad y por esta visita”, ha enfatizado.
La visita
Invitado por el propio presidente cántabro, el príncipe Alberto ha tenido la oportunidad de conocer el proyecto del Centro de Arte Rupestre, que permitirá poner en valor y proyectar internacionalmente todo el patrimonio de arte rupestre de Cantabria y sus diez cavidades Patrimonio de la Humanidad.
Revilla, junto con el vicepresidente, Pablo Zuloaga; el consejero de Turismo, Javier López Marcano; el alcalde de Puente Viesgo, Óscar Villegas, y el director del Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria (MUPAC) y de Cuevas Prehistóricas de Cantabria, Roberto Ontañón, ha guiado al príncipe en un recorrido por las instalaciones del edificio, que se estructura en tres bloques organizados en torno a un patio central, que acogerán el área administrativa y de admisión, la zona de recepción de visitantes y el área expositiva.
También han estado presentes la embajadora de Mónaco en España; Catherine Fautrirer, y las directoras generales de Acción Cultural, Gema Agudo; de Patrimonio Cultural, Zoraida Hinojosa; de Turismo, Marta Barca, y de Cooperación al Desarrollo, Silvia Abascal, entre otros.
A continuación, la comitiva de autoridades ha visitado las cuevas del Monte Castillo para conocer los últimos hallazgos e investigaciones sobre las pinturas y sobre el grado de conservación del conjunto rupestre, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2008.
Su reencuentro con el Monte Castillo ha servido el príncipe de Mónaco para reforzar los vínculos de su familia con las cuevas y reivindicar la figura de su tatarabuelo, coincidiendo con la conmemoración del primer centenario su fallecimiento. Y es que Alberto I (1848-1922) financió las primeras investigaciones que se llevaron a cabo en estas cavidades rupestres que llegó a visitar hasta en dos ocasiones, en 1909 y en 1914.
Por último, la visita del príncipe de Mónaco ha concluido con un almuerzo privado con una delegación institucional de Cantabria.
Como recuerdo de su segunda visita a Cantabria, el presidente ha obsequiado al príncipe de Mónaco con sendos libros sobre el Monte Castillo (‘La montaña sagrada’) y Beato de Liébana, aprovechando la celebración en 2023 de un nuevo Año Jubilar Lebaniego. Asimismo, le ha entregado una vidriera del artista cántabro Tomás Saiz Castillo, natural de Bárcena de Pie de Concha, que representa la imagen más antigua de la que se tiene conocimiento del Apóstol Santiago, fechada en el siglo X, y asociada a la figura de Beato de Liébana.
Por su parte, el alcalde de Puente Viesgo, Óscar Villegas, ha concedido al príncipe el bastón de mando municipal en reconocimiento a la vinculación de su familia con la localidad y su labor de mecenazgo. Además, Alberto II ha firmado en el libro de honor del Ayuntamiento.