El pasado día 16 el jurado falló a favor de la obra ‘Séptimo’, primando, entre otros aspectos, el profundo conocimiento del autor sobre el monumento y las características físicas del material soporte de piedra franca; su integración y armonía en el contexto de la Plaza Mayor, así como su composición y calidad estética. En la elección de la pieza han participado la Comisión Técnico Artística Municipal y varias personas de reconocido prestigio designadas por la Comisión Territorial de Patrimonio de la Junta de Castilla y León y la Universidad de Salamanca. La vinculación artística del creador con la ciudad de Salamanca viene de lejos, ya que ha sido responsable de otros medallones en el ágora salmantino como los dedicados a Miguel de Unamuno (1986); Elio Antonio de Nebrija (1992); Fernando VII (2005); Alfonso XIII (2005); La Primera República (2005), y D. Juan de Borbón (2005).
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El reputado artista Óscar César Alvariño Belinchón ha resultado ganador del concurso de propuestas convocado por el Ayuntamiento de Salamanca para elegir el medallón dedicado a Alfonso IX que se ubicará en la Plaza Mayor de Salamanca en conmemoración del octavo centenario de la fundación de la Universidad de Salamanca, tras el fallo el pasado día 16 de diciembre del jurado constituido por la Comisión Técnico Artística Municipal y varias personas de reconocido prestigio designadas por la Comisión Territorial de Patrimonio de la Junta de Castilla y León y la Universidad de Salamanca.
En dicho concurso se han presentado un total de 13 bocetos, identificados exclusivamente bajo un lema, garantizando de esta forma el anonimato de los autores.
En el marco de un amplio debate, el jurado se decantó por la obra titulada ‘Séptimo’ destacando el profundo conocimiento que ha manifestado el autor sobre el monumento y las características físicas del material soporte de piedra franca; la integración y la armonía de la pieza en el contexto de la Plaza Mayor y los medallones ya existentes; la composición y calidad estética del altorrelieve en el marco moldurado; el estudio de las proporciones en sus perspectivas visuales, así como la incidencia de la luz para plantear la disposición del busto y potenciar el claroscuro en los rasgos del personaje, con un efecto estilístico de gran tradición barroca.
Una vez que el jurado decidió la obra ganadora, se abrió el sobre para conocer la identidad de su creador que resultó ser Alvariño Belinchón. Su vinculación con la ciudad de Salamanca viene de lejos, ya que ha sido responsable de varios medallones tallados en la Plaza Mayor dedicados a Miguel de Unamuno (1986); Elio Antonio de Nebrija (1992); Fernando VII (2005); Alfonso XIII (2005); La Primera República (2005), y D. Juan de Borbón (2005).
El ganador es profesor titular en el Departamento de Escultura de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid. Su trayectoria profesional se ha desarrollado ampliamente en el espacio público de ámbito monumental con numerosos premios, reconocimientos y exposiciones a nivel nacional e internacional.