El alcalde de Gradefes, Amador Aller, ha mostrado ayer su agradecimiento por el comportamiento solidario y ejemplar de los vecinos, así como a todas aquellas personas que de una manera u otra, están poniendo todo su esfuerzo a disposición y colaborando para minimizar los efectos de la crisis sanitaria en el municipio.
29 de abril de 2020.-“Desde que empezó esta pesadilla del coronavirus, el tejido humano del territorio del de Gradefes se empezó a organizar. El equipo de Gobierno del Ayuntamiento, sus juntas vecinales, asociaciones, el Centro de Día Municipal “Ribera del Esla” y otras personas voluntarias y colaboradoras formaron ya desde los primeros días del Estado de Alarma un grupo de trabajo para coordinar y atender a las personas más vulnerables de este municipio, proveerles de lo básico en estos momentos como alimentos, medicamentos y, en algunos casos, compañía telefónica”.
En este sentido, se estableció como centro de coordinación el Ayuntamiento y el Centro de Día Municipal Ribera del Esla de Gradefes, a través de los que se ha ido atendiendo la demanda y el reparto.
A medida que avanzaba la pandemia y faltaban medios de protección contra el virus, se puso en marcha un equipo de personas voluntarias para la confección de mascarillas y batas y su distribución entre los profesionales sanitarios y los habitantes del municipio.
Además, para subir los ánimos en estos largos días, los vecinos han ido haciendo sus vídeos de cuarentena que se están compartiendo en la página de Facebook del Ayuntamiento así como en la sección de noticias de su página web www.aytogradedefes.es.
Amador Aller se ha mostrado convencido de “que juntos y desde casa venceremos y saldremos de esta situación” y, “como alcalde de este municipio del que tan orgulloso me siento, quisiera resaltar, elogiar y agradecer a todos su implicación social en la batalla contra este virus, en especial a las Asociaciones, a las personas voluntarias y a la directora del Centro de Día de Gradefes, Mónica, que enfundada en su equipo protector, se dirige a los domicilios para entregarles alimentos o medicamentos o para interesarse por su situación personal, aprovechando estas visitas para entregarles esperanza y una flor. Todo un ejemplo”.