Se trata del Dolmen de la Ermita y el Castillo de Cespedosa de Tormes ambos en la provincia de Salamanca.
El Dolmen de la Ermita se encuentra en Sahelicejos, Villar de Peralonso (Salamanca)
El dolmen no conserva ninguna cubierta, la que tiene ahora es vegetal, de troncos y ramas ya que se usa o se usó como zahurda, en su interior aún hay algunos comederos de piedra. Cerca del dolmen hay un pontón de piedras que pudieron ser de este dolmen.
Es un buen ejemplo de la antigua santificación de los lugares paganos. Junto a este dolmen y comido por la vegetación, se encuentran a la vista y otras se intuyen en el terreno, diversas tumbas elaboradas con lascas.
Carácter del riesgo: Pérdida del edificio ayudada por el abandono del mismo y la acción de la vegetación, con desgaste continuado de sus muros por las inclemencias del tiempo Época:
Estado: Abandonado y ruina progresiva. Ha sido utilizado como pesebre.
Castillo de Cespedosa de Tormes
Cespedosa De Tormes después de la reconquista, perteneció al concejo de Ávila, debiendo ser repoblada alrededor del año 1100 por Don Raimundo de Borgoña. En la época de su repoblación, debió tener murallas siendo éstas anteriores al Castillo. Tuvo pleitos por límites de tierras con el vecino concejo de Salvatierra que duraron hasta bien entrado el siglo XV.
Cerca del cauce del río Tormes, se alza la sólida torre fuerte de los Dávila y Guzmán a quienes el rey Enrique III el Doliente les concediera el señorío de la Villa. Construido el castillo en el S.XV, es de planta rectangular, con muros de mampostería granítica con refuerzos de sillería en los ángulos, rematado por almenas y voladizos matacanes en lo alto de los muros. En otro tiempo fue frontera entre Castilla y León.
Por los escudos que se conservan en sus ventanales, se sabe que perteneció a la Casa de Alba así como a los Castros y los Dávila.
Actualmente es inhabitable, sirviendo de cobijo a las aves.
Estado: Su estructura exterior se encuentra relativamente en buen estado. No así la interior, de la que sólo quedan restos de la chimenea y de los arranques para las vigas y algunos bancos de piedra junto a las ventanas. En uno de sus lados presenta una gran abertura, que según tradición popular, fue debida a una explosión con dinamita. Como en otros tantos lugares, sus piedras se han reaprovechado.
Carácter del riesgo: Derrumbes y/o desaparición total.
Texto y más info: http://www.hispanianostra.org/lista-roja/
Fotografías Hispania Nostra y artesiver fotografía.