Realizar la visita a pie de Aveiro tampoco supone demasiado esfuerzo, ya que la ciudad es llana, y al que le guste pedalear puede optar por las “bugas”, las bicicletas que ofrece el Ayuntamiento de Aveiro de forma gratuita
Junto al mar y a la ría, una red de canales por los que pasean barcos moliceiros atraviesa Aveiro. Estas alargadas y coloridas embarcaciones servían para recoger algas y sargazo, aunque en la actualidad se utilizan para paseos turísticos.
Vagar por Aveiro es sumergirse en las aguas del Centro de Portugal. Conocida como la “Venecia de Portugal”, la ciudad se deja dominar en silencio por su Ría de Aveiro, descrita por Saramago como “un cuerpo vivo que une la tierra con el mar como un enorme corazón.
La ría de Aveiro es considerada una de las más hermosas e importantes de Portugal. Se extiende, en su interior, en un sentido paralelo al mar, cercana a la costa del océano Atlántico, en una longitud de 47 km. Tiene una anchura de 11 km, de este a oeste y llega desde Ovar hasta Mira en sentido Norte-Sur. La ría es el resultado de la retirada del océano Atlántico, lo cual ha generado franjas costeras que, desde el siglo xvi, formaron una laguna que es uno de los accidentes fluviales más importantes y bellos en toda la costa Atlántica.
La ría se compone de cuatro grandes canales ramificados que rodean una serie de islas e islotes. En esta ría desaguan los ríos Vouga, Antuã y Boco, teniendo como única comunicación con el mar un canal entre Barra y S. Jacinto, permitiendo el acceso al puerto de Aveiro a embarcaciones de gran calado.