Sabores de aquí y del otro lado del charco se dan la mano en la cocina vista de este coqueto local para hacer viajar al paladar. Además no faltan los cócteles, perfectos para disfrutar también en su privilegiada terraza de la pl. de la Lealtad. Para acompañarlos, un fresquísimo guacamole, un original taco de arenques o, por qué no, unas albóndigas de ibérico… y es que ¡sus fogones son non stop!.
Madrid, mayo 2016.La fusión es una de las tendencias que triunfan en la cocina, nos quedamos con lo mejor de aquí y de allá para crear deliciosas e insospechadas combinaciones que hacen feliz al paladar. En las mesas de Comala (Plaza de la Lealtad, 3. Madrid. Tel. 91 504 78 27. www.restaurantecomala.es) la experiencia se traduce en un viaje al otro lado del charco con interesantes paradas en la adictiva gastronomía mexicana, sin olvidar por supuesto, los sabores de nuestra tierra, como bien refleja su original logo, que aúna nuestros dos ‘símbolos’: un cactus y un olivo.
Y hablamos de experiencia con todas las letras porque el equipo, tanto de cocina como de sala, está formado en el prestigioso restaurante Viridiana. Al frente de Comala se encuentra la joven Myriam Moreno, que dirige y supervisa cada detalle con mimo e ilusión, buscando que todo el mundo se sienta como en casa y disfrute de las sabrosas creaciones de los ‘incesantes’ fogones del restaurante, así como de los ‘tragos’, desde un cóctel, pasando por un buen vino hasta un reposado tequila.
Y es que el concepto Comala es fusión en sí mismo, porque alberga un conjunto tentador y apetecible: taquería, bar, restaurante, coctelería, terraza durante todo el año… es, sin duda, un lugar ante el que muchos caerán rendidos. Como taquería que es, la carta la abren 6 espectaculares tacos, siendo la estrella indiscutible la Tortilla de trigo rellena de ropa vieja al buen gusto Andaluz, en el que la ‘mezcla’ está más que presente ya que, como apunta Myriam, “la tortilla suple feliz al mollete antequerano”. Entre las propuestas más frescas y recién llegadas a la carta, destacan el Salmorejo de fresones con jamón ibérico, nopalitos y tortillas de maíz o el Carpaccio de tomate con picada de mango, pepino, papaya y cebolla roja. Ah, que aunque está en la segunda hoja de la carta, no puede faltar el Guacamole con tortillas de maíz y plátano macho frito.
Una vez abierto el apetito, toca decantarse por alguno o algunos de los principales, porque la carta es perfecta para compartir, cosa que se agradece, porque plato que se lee, ¡plato que apetece! El protagonista aquí es Huevo, en sartén, sobre mousse de hongos con poquito foie de pato y setas silvestres salteadas con jamón ibérico y ajos tiernos. Entre los pescados no faltan el salmón, servido en tartar, eso sí, marinado en tequila, o un Ceviche de dorada. Para los carnívoros, las Albóndigas de ibérico en salsa mexicana, cuscús al azafrán y batata se han convertido en un must. Y hay que dejar sitio para el postre… Una opción, la sublime Mousse quemada de maracuyá con bayas silvestres.
Y para disfrutar de todo esto -y mucho más, porque las opciones a la hora de beber también son muchas-, tres ambientes bien diferenciados: La pequeña sala, con capacidad para 26 personas distribuidas en mesas altas y bajas; la bonita barra, en un lateral del local y con 8 taburetes para quienes tengan prisa o prefieran un picoteo más informal, por ejemplo, una Michelada o una perfecta Margarita, con un original taco de Escalibada con atún en escabeche al lemon grass… una oferta veraniega que resulta ideal también a cualquier hora del día en su privilegiada terraza para 30 comensales con vistas al Ritz y a la Bolsa. Climatizada y con hilo musical, es ideal para alargar la sobremesa de comida o cena. Además en verano la terraza se amplía, al aire libre, con otros 20 asientos. El horario de Comala (www.restaurantecomala.es) es de 12:00 a 01:00h. y la cocina permanece abierta de 12:00 a 00:00 horas. El precio medio es 26 € a mediodía y de 32 por las noches.
