En un acto simbólico, al final de la jornada se soltaron dos aves, un milano y un águila de alas redondas, recogidas en situación vulnerable y recuperadas para devolverlas a su estado natural.
Fotografía: CM Bragança
El pasado 30 de agosto tuvo lugar la celebración del 43º aniversario del Parque Natural de Montesinho, en la localidad de Río de Onor, poniendo en perspectiva el futuro de este área protegida bajo el nuevo modelo de cogestión, que busca reforzar el vínculo entre la naturaleza y las personas.
Fotografía: CM Bragança
«El Ayuntamiento de Bragança se unió al proceso de cogestión para valorar lo que considera el valor más activo del Parque: las personas», manifestó Hernâni Dias, alcalde de Bragança y presidente del modelo de cogestión del Parque Natural de Montesinho. «Hay muchos aspectos positivos desarrollados a lo largo de los últimos 43 años e ideales fundamentales que deben mantenerse, en lo que respecta a la conservación de la naturaleza y a las preocupaciones medioambientales emergentes, pero hay cambios efectivamente necesarios para el bienestar de quienes viven, trabajan y visitan aquí», reiteró el edil, añadiendo que «el verdadero sentido del Parque es promover el perfecto equilibrio entre la naturaleza y las personas».
«En este momento, todas las entidades implicadas en el proceso de cogestión están en armonía, trabajando codo con codo para una participación más activa y una valoración real de la población. Hay una apertura muy positiva y la voluntad de todos de alabar y mejorar el Parque Natural de Montesinho. Sólo así tiene sentido», concluyó Hernâni Dias .
Fotografía: CM Bragança
La iniciativa contó, además de la sesión de bienvenida, con un «seminario en movimiento», en un paseo interpretativo por el pueblo de Río de Onor. Además de conocer los lugares de la comunidad como la aldea y sus usos y costumbres, en la voz viva de los habitantes locales.
Los presentes también tuvieron la oportunidad de conocer la importancia de los ecosistemas acuáticos, en una breve explicación del profesor Amílcar Teixeira, y del castaño, por el profesor Albino Bento.
En un acto simbólico, al final de la jornada se soltaron dos aves, un milano y un águila de alas redondas, recogidas en situación vulnerable y recuperadas para devolverlas a su estado natural.
