Las Fiestas Patronales en honor de la Virgen de la Vega se celebran en torno al llamado Lunes de Pascuilla, ocho días después del Domingo de Resurrección. Es tradicional durante las mismas la “Petición del toro enmaromado” que recorrerá las calles cincuenta y un días después.
La fiesta de La Veguilla es una tradición que se remonta a unos quinientos años, concretamente se viene celebrando desde comienzos del siglo XVI (1520). Consistió inicialmente en una romería que se realizaba cada año al Santuario de Nuestra Señora de la Vega en Cimanes, para conmemorar la victoria de los comarcanos sobre las tropas musulmanas allá por el siglo IX.
Siendo ésta al parecer una batalla decisiva gracias a la aparición milagrosa de la Santísima Virgen, que con su hijo en el regazo y arrojando piedras contra las huestes de los infieles, alentando con su presencia a los benaventanos que obtuvieron una sonora victoria.
Así nos lo cuenta la tradición, que oralmente ha ido transmitiéndose de padres a hijos. Aunque esta creencia tenga un componente legendario, lo cierto es que una batalla llamada de Polvoraria, que otros denominan “del Mato”, tuvo lugar en las proximidades de Benavente o en su comarca según recogen las crónicas medievales.
La villa de Benavente la reconoció posteriormente como su Patrona, colocándola en su escudo de armas, y ofreciéndose todos los años a celebrar con una fiesta solemne la memoria de este suceso, perpetuándose la obligación durante siglos de asistir el Ayuntamiento y los capitulares del Cabildo eclesiástico a pasar en procesión hasta su Ermita de Cimanes de la Vega, para asistir a la misa que en cumplimiento de un voto o promesa antiquísima tenía hecha la villa de Benavente. También y a consecuencia de este acontecimiento figura la Virgen como la más brillante insignia en su escudo de armas y es la imagen que ostentaba en su bandera. Es representada resplandeciente y triunfante sobre un puente entre dos castillos que simbolizan la fortaleza de la villa. Es también Patrona de numerosos pueblos de la Ribera del Esla.
Anualmente se renovaba el llamado “voto de villa”, así se indica que: ”la villa de Benavente y su Ayuntamiento, tienen la obligación de ir en romería todos los años en el lunes de Pascuilla a la ermita de Nuestra Señora de la Vega”. A comienzos del siglo XIX el voto se conmuta definitivamente pasándose a celebrar esta festividad en la propia villa de Benavente, desde entonces una solemne procesión recorre algunas de las calles benaventanas para honrar a la pequeña imagen de la Patrona que se venera en la iglesia de Santa María del Azogue.
Actos y Componentes de la Fiesta
El Lunes de Pascuilla tiene lugar durante la mañana la Procesión de la Veguilla, durante la cual la Patrona recorre algunas de las calles céntricas de la ciudad portada por las representaciones de las Peñas benaventanas.
A primera hora de la tarde tiene lugar la tradicional: Petición del Toro Enmaromado, el acto en el que se congrega una multitud en la Plaza Mayor de la ciudad y calles aledañas. Todos al grito al unísono de “toro, toro, toro”, solicitan a la autoridad la concesión del astado, para que, la fiesta que tendrá lugar el miércoles de la semana del Corpus (51 días después de la Veguilla) pueda un año más como tradicional constumbre celebrarse.
Otra tradición en torno a esta fiesta es la entrega y reparto del denominado “Pan de la Veguilla”. Durante estas fechas tienen lugar diversas actuaciones musicales y folklóricas. Además de una vistosa concentración de Gigantes y Cabezudos, que venidos de diferentes localidades da inicio a las fiestas.