En la proximidad de la que fue frontera pronunciada por la historia de esta Iberia que nos hermana, pensando en Unamuno, Pessoa, Saramago, Lobo Antunes, profundos iberistas (idea que me sumerge en raíces ancestrales), desdibujo la Raya con el vuelo blanco de un pájaro para iniciar este viaje de 20 días, por los Monasterios, Conventos y Palacios más representativos de Portugal.
Huele a Junio, a la siega, y cruza el cielo infinitas veces el trepidante vuelo de los vencejos. Aquí en esta estrella amurallada, Ciudad Rodrigo, en este abrazo que no deja indiferente a los visitantes, iniciaremos con el solsticio de verano esta andadura, el día 21, el día más largo, toda la luz y la magia en esta ciudad de palacios que celebra este año el 75 Aniversario de su Declaración como Conjunto Histórico-Artístico. Conjunto que a pesar del desgaste de las guerras, asedios, incursiones militares… que dejaron atrás ruinas de monasterios, conventos y en otros casos monumentos desaparecidos como el convento de Santa Cruz fundado por Beatriz Pacheco o la anterior catedral situada en extramuros. Aún así ha mantenido el pulso a lo largo de los siglos y rezuma por sus costados innumerables historias para ser descubiertas. Quizá a la vuelta logremos descifrar algunos de los misterios que esta ciudad monumental encierra en sus doradas piedras y así cerrar el círculo.
Con el sol temblando como hoja al viento, susurrando Que vendrá, que vendrá… de Zaz, nos dejaremos mecer por la aventura para descubrir Portugal, amarrándonos a su historia, a su arte, fundiéndonos en el pálpito, que como bien dijo en su libro de viajes El Río del Olvido Julio Llamazares: “los caminos más desconocidos son los que más cerca tenemos del corazón”. Y en nuestro corazón siempre está Portugal, sus fados, su sentir poético.
Muchos monasterios y palacios conocerán nuestros pasos: Braganza, Vila Real, Braga, Oporto, Coimbra, Mafra, Lisboa, Sagres, Faro, Évora…
En el blog Entre Mapas y Candiles, en Instagram y otras redes compartiremos cada latido.
Desde esta muralla, desde su imponente castillo traspasaremos la línea transparente hacia ese rostro perpetuo, imantados por la suma de voces de Marisa y Vanesa Martín. Cruzaremos esa Fronteira da Paz, llamada así en memoria a los refugiados de la Segunda Guerra Mundial. Y ya en tierras da Beira, seguiremos el dictado del poema Manual do Viajante de Nuno Júdice:
- Deixe que o conduzam pela berma do passeio…
- Por vezes, sentirá a sombra de uma árvore rara, cujas folhas são únicas no país.
- .
Nuestro agradecimiento a los patrocinadores del viaje, sin ellos no sería posible: BMW Ibérica, BMW Movilnorte Motorrad, Trimotos, Autoservicio del Motorista, Spidi, Paradores de España, Parador de Ciudad Rodrigo, Restaurante La Veinte de Ciudad Rodrigo, Taberna La Andaluza de El Álamo, Pousada de Mafra-Palácio dos Marqueses, Palace Hotel do Bussaco-Hotéis Alexandre de Almeida, Rodando contra el Cáncer
©Sibila