Ya desde la Prehistoria podemos encontrar restos de asentamientos humanos en Vilvestre, prueba de ello es el Santuario Rupestre situado en el cerro del Castillo y las diversas herramientas de piedra encontradas en la zona (hachas, martillos,…)
En la época romana también hubo varios asentamientos en el término municipal, pero es a partir del siglo X cuando verdaderamente conocemos la existencia de una población estable en Bilbestre (que así se llamaba entonces).
Vilvestre siempre ha sido lugar de frontera y prueba de ello es el resto de la muralla del castillo que aún se conserva. El castillo fue construido en la Edad Media para defenderse de los ataques de Portugal y parece que fue gobernado por Ruy Gómez de Silva, Príncipe de Éboli. Dicha fortaleza fue usada en tiempos de guerra y abandonada o usada de manera residual en época de paz, hasta finales del siglo XVII que se abandona definitivamente.
En el siglo XVIII era ya una defensa inservible. Lo más seguro es que la construcción fuera de líneas abaluartadas y una estancia estuviera destinada a capilla de la Virgen. Nuestra Señora del Castillo, que en 1757 tuvo ermita propia, seguramente procediera de la fortaleza.
Vilvestre siempre ha estado vinculado al Duero.
El Catastro de la Ensenada lo sitúa a poniente de este término y Madoz (Diccionario Geográfico, Estadístico e Histórico) explica cómo los naturales, mediado el siglo pasado, lo atravesaban en barca. Y a este río aluden las cuatro bandas azules colocadas en punta de su escudo. Dado el microclima de este término municipal, siempre han abundado los árboles frutales, dedicando gran parte del territorio al cultivo de olivos. Hay una zona bastante extensa conocida por “Los Olivares”. Por ello existe también un olivo en el escudo.
Desde el siglo XVIII hasta nuestros días la vida de Vilvestre ha transcurrido de forma más o menos tranquila, sólo alterada por los periodos de guerra, y con la agricultura y la ganadería como medio de vida principal.
Que ver
Es típico de Vilvestre las casas con grandes balcones de laja de pizarra en una sóla pieza y barandilla de forja muy ornamentada. Normalmente estos balcones están cubiertos por un tejadillo que lo resguarda. Estas construcciones datan del siglo XIX y principios del XX.
En lo alto del cerro y sobre los restos de un castro celta, estaba el castillo de frontera con Portugal. Fue un punto estratégico durante la Guerra de Sucesión a la Corona de Castilla (1475-1479) entre Isabel I de Castilla y Juana la Beltraneja, casada con el rey Portugués Alfonso V de Portugal. La fortaleza estuvo tomada por los portugueses durante dos años aunque en 1479 es recuperada por la Corona de Castilla y dotada de una pequeña guarnición.
A mediados del siglo XVII tras la Guerra de la Independencia de Portugal el castillo acabó abandonándose y cayó en ruina.
En el año 1987 fue rescatado para la memoria colectiva en una excavación que dejó ver parte de la muralla.
En lo alto del pueblo, velando por todos los hijos de Vilvestre, se encuentra la Virgen del Castillo, la cual preside el retablo mayor de una ermita que se construyó hacia el año 1757 de estilo barroco- clasicista.
También podemos reseñar que situado en el centro de Vilvestre se encuentra el Rollo de Justicia, conocido popularmente como La Cruz. Esta obra artística de estilo Gótico Manuelino pertenece al siglo XVI y en ella se exhibían las cabezas de los ajusticiados y se exponían a los reos para vergüenza pública. Este monumento está emparentado con los pelourinhos portugueses, y sorprende la gran riqueza decorativa. Está compuesto por cilindros de granito, el superior es posterior al siglo XVI y fue colocado en sustitución del primitivo, adornados con motivos florales, conchas y sogueados.
La parte superior (la cruz) fue colocada siglos después, cuando el rollo de justicia dejó de ser usado al ser abolidos el tipo de castigos que en él se practicaban.
Otro punto de interés es la ermita de la Virgen del Castillo. Llama la atención de esta erminta que el retablo es de granito, esto posiblemente sea debido a la orden que dio el rey Carlos III de prohibir la tala de árboles puesto que la fabricación de este retablo coincide con su reinado. En dicho retablo a los lados de la Virgen se encuentran dos imágenes que corresponden a San Joaquín y a Santa Ana, los padres de la Virgen y la parte inferior alberga las imágenes de un niño Jesús, San Antonio Abad y San Mauro. En el resto de la ermita se pueden apreciar arcos de medio punto apoyados en pilastras, el coro se sitúa a los pies de la espadaña y luce una hermosa barandilla en forja.
La iglesia parroquial de Vilvestre se encuentra situada en la Plaza Mayor y es una obra más de las muchas que realizó por la zona el maestro Pedro de Lanestrosa (Pedro el Viejo). Su construcción fue realizada con sillares de granito, es de una sola nave y con una capilla mayor con bóveda de crucería de estilo gótico final (año 1540). La planta corresponde a principios del siglo XVII y es de estilo renacentista, llama la atención su artesonado de madera de estilo mudéjar. Destaca el retablo central, de estilo barroco (año 1678) de dos cuerpos con cuatro columnas de estilo salomónico adornadas con motivos florales y racimos de uvas.
Al finalizar el descenso del puerto de la carretera que lleva hacia el río Duero, justo en el lugar donde la carretera se bifurca, nos encontramos con otro punto de interés: el molino de aceite que ha sido reconstruido en varias fases. En este lugar descubriremos como se fabricaba de manera tradicional ese oro líquido tan español que es el aceite de oliva.
También hay en Vilvestre un antiguo molino harinero situado en la ruta más corta hacia el Monte Gudín, junto al Arroyo de la Nava, y que recientemente también ha sido restaurado. Este molino aprovechaba la fuerza del agua que se canalizaba desde el arroyo y hacía girar las piedras que molían el grano hasta convertirlo en harina
Santuario rupestre “El Castillo”
Este monumento, descubierto a finales de los años 60 por D. Luis Benito del Rey, ha sido declarado Bien de Interés Cultural (B.I.C.).
En Vilvestre siempre se ha conocido como un taller neolítico, ya que fue la primera hipótesis que surgió, pero estudios posteriores sostienen que se trata de un santuario prehistórico.
En este lugar, excavadas sobre la roca madre, se pueden contemplar numerosas incisiones verticales y cazoletas en la parte superior. La parte inferior la conforma un banco corrido con unas cavidades y un saliente mesiforme.
Está situado en lo alto del pueblo en el paraje conocido como El Muro y se considera uno de los monumentos prehistóricos más importantes de Europa
Mas info: http://www.vilvestre.es/