La temporada de turismo activo y deportes de aventura 2017 se ha iniciado con 230 empresas, distribuidas por el conjunto de las 13 comarcas leridanas, que ofrecen una cincuentena de actividades de tierra, aire y agua. Las perspectivas para esta campaña son buenas y se prevé un aumento de entre el 8 y el 10% de los servicios contratados con respecto al año anterior, lo que supone superar los 700.000 servicios.
Durante la presentación de la temporada de turismo activo y deportes de aventura 2017, que se celebró en Llavorsí, el presidente de la Diputación de Lleida, Joan Reñé, destacó que la campaña se inicia con unas condiciones inmejorables para las actividades relacionadas con el agua gracias a las fuertes nevadas de este invierno. Reñé explicó que se prevé un incremento de la contratación de actividades de entre un 8 y un 10%. Esto significa que la cifra de servicios al finalizar la temporada estaría por encima de los 700.000. Si se alcanza este objetivo, el número de actividades se situaría en los mejores porcentajes obtenidos en la demarcación de Lleida.
El acto contó con la participación del vicepresidente tercero y vicepresidente del Patronato de Turismo, Gerard Sabarich; del director del Patronato de Turismo, Juli Alegre, además del presidente del Consejo Comarcal del Pallars Sobirà, Carles Isús, y del presidente de la Asociación de Empresas de Deportes de Aventura del Pallars Sobirà, Florido Dolcet.
La temporada 2017 comienza con 230 empresas (187 en la zona del Pirineo y 43 en el llano de Lleida), que ofrecen una cincuentena de actividades de tierra, aire y agua. Esta cifra supone un incremento de un 2,68% respecto a la oferta del inicio de la campaña 2016, cuando había 224 empresas.
En los últimos 4 años se constata una cierta estabilización en cuanto al número de empresas, que fluctúan entre las 230 de este año y las 223 del 2014.
Rafting, el producto estrella
La temporada 2016 se cerró con una contratación de 670.577 servicios, un 4% más que el año anterior. Las actividades de tierra aglutinaron el mayor número de contrataciones con 332.825 servicios. Las actividades de agua sumaron 325.732 servicios y las de aire sufrieron un ligero descenso respecto a la temporada anterior, con 12.020 contrataciones.
El rafting siguió siendo el producto estrella de las distintas modalidades de turismo activo y deportes de aventura durante el año 2016 con 161.120 servicios contratados, seguido de las actividades de trekking y el senderismo, con 135.382 servicios contratados.
En tercer lugar por el volumen de servicios contratados se situó el descenso de barrancos, con 102.855, seguido de la BTT con 92.813, un sector que también muestra un incremento de la demanda.
93 millones de euros de impacto económico
El impacto económico de este sector en el año 2016 fue de 93 millones de euros (considerando los ingresos procedentes de la propia actividad, el alojamiento y la restauración). Estas cifras suponen un incremento de 700.000 euros respecto al año 2015 en la contratación de actividad directa y de unos 5 millones de euros más si se contabiliza el impacto económico directo en el sector de la hostelería y la restauración.
El cliente que practica actividades de turismo activo y deportes de aventura en la demarcación de Lleida sigue siendo mayoritariamente de Cataluña con un 72,5% del total, sobre todo de Barcelona. Otro 15% se desplaza desde otras comunidades autónomas, mientras que el mercado extranjero, que representa el 11% de los clientes, es sobre todo de origen francés, holandés e inglés, sin olvidar los visitantes israelíes y también americanos.
En cuanto al personal contratado, durante la temporada 2016 se redujo en un 6% con respecto a 2015, al pasar de 2.041 personas a 1.917 la campaña anterior, de las que 727 trabajaron a tiempo completo, 390 a tiempo parcial y otras 800 fueron personal autónomo.
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