Hasta el 2 de julio, los visitantes podrán disfrutar de diferentes propuestas de Vodevil, creatividad, drama, realismo, títeres y humor.
Los orígenes de Sepúlveda datan de la Edad de Hierro, cuando nace como un castro céltico. Miles de años después, las diferentes civilizaciones han permitido que los visitantes, hoy en día, encuentren una villa rica en atractivos monumentales, como son su castillo y murallas o la gran cantidad de iglesias que salpican su trazado. Una localidad con aire medievales que llegó a gozar de siete puertas. Inspirado en ello, ‘Siete Llaves’ es el título que pone nombre al Certamen de Teatro Aficionado que cada año pone el acento cultural al inicio del verano en este bello punto del territorio segoviano.
El telón del Teatro Bretón de Sepúlveda volverá a abrirse el 3 de junio para celebrar el V Certamen de Teatro Aficionado ‘Siete Llaves’ de Sepúlveda. Hasta el 2 de julio, cuando tendrá lugar la Gala de Clausura del evento, se podrá disfrutar en la villa de siete obras caracterizadas por su diversidad y calidad, ofreciendo mucho y buen teatro.
Desde que el Ayuntamiento convocase el pasado mes de enero el Certamen y hasta la fecha límite para presentar los trabajos, se han llegado a recibir más de un centenar de solicitudes de regiones como Madrid, Cantabria, Andalucía, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Extremadura, Aragón, País Vasco, Comunidad Valenciana, La Rioja, Asturias y Murcia.
Todas las obras seleccionadas se representarán en el Teatro Bretón a las 22.00 horas, excepto la del 17 de junio, que tendrá lugar a las 22.30 horas. Las entradas tendrán un coste de 5 euros y el bono para las siete funciones se encuentra disponible por 25 euros.
Así, la programación estará encabezada el viernes 3 de junio por ‘Miedo me da’, de Demikó Teatro (Carranque, Toledo), en la que unos cabareteros celebran, con un terrorífico humor musical, un homenaje a todas estas situaciones que ponen los pelos de punta: el temor. Al día siguiente, sábado 4 de junio, tomará el relevo ‘El Malentendido’, del Grupo de Teatro La Galerna (Gijón, Asturias), drama dominado por la intriga, la locura, las ganas de huir, las ansias de fortuna y la frialdad.
‘Don Quijote y Sancho somos todos’ se representará el viernes 10 de junio a cargo de la Compañía Loca-l (Segovia, Castilla y León). Los asistentes comprobarán cómo un director de teatro va probando a todos sus actores para interpretar los papeles de esta clásica novela, descartándoles progresivamente. El sábado 11 de junio les seguirá ‘Tres papás para Totó’, del Grupo de Teatro Coliseo (Callosa de Segura, Alicante), singular comedia llena de enredos, engaños, amenazas, risas, situaciones ridículas, equívocos, picardías y celos.
El viernes 17 de junio -único día en que la representación tendrá lugar a las 22.30 horas, en vez de a las 22.00 horas-, llegará desde Elche (Alicante) la compañía Sahara Teatre con la obra ‘…de piojos y otros actores…’, en la que se juega con dos espacios temporales diferentes: el que viven los actores (siglo XVI) y el que rodea al público.
Lomascrudo Teatro (Alcobendas, Madrid) representará el viernes 24 de junio ‘El conflicto de Papín, las hermanas asesinas’. La obra permite ver a dos criadas que, ausente la dueña de la casa, viven en un clima constante de rivalidad y tensión, llegando a planificar la muerte de la señora. El sábado 25 de junio, el certamen concluirá con ‘Mamá… ¡¡¡pis!!!’, de Corocotta Teatro (Reinosa, Cantabria). A través de una óptica irónica, desenfadada, cómica y un tanto mordaz, se describe una elocuente fórmula sobre el secreto de cómo ser padres y cómo ser hijos y no morir en el intento.
La villa acogerá la Gala de Clausura y Entrega de Premios, que tendrá lugar el sábado 2 de julio a las 20.00 horas. Un jurado compuesto por personas vinculadas al mundo de la cultura y el teatro decidirá quiénes serán los galardonados con las diferentes llaves: Llave a la Mejor Compañía (dotada de 1.000 euros), Llave a la Compañía Finalista (dotada de 700 euros), Llave al mejor montaje (dotada de 500 euros), Llave a la Mejor Dirección, Llave al Mejor Actor, Llave a la Mejor Actriz, Llave al Mejor actor de reparto y Llave a la Mejor actriz de reparto. A todas ellas se suma la Llave Especial del Público.
Sepúlveda, siempre atractiva para una escapada
Un paseo por Sepúlveda supone aproximarse con cada paso al Medievo. Sus murallas se pueden seguir en diversas zonas del entramado urbano, como es el tramo del Trascastillo, recientemente restaurado, o del Postiguillo. Asimismo, la localidad conserva alguna de sus siete puertas (elementos que, según la creencia popular, dieron nombre a esta villa), entre las que figuran la del Ecce Homo, la del Río -ubicada en el barrio de San Esteban, junto a la hornacina de la Virgen de las Pucherillas- o los restos de la Puerta de la Fuerza.
Del antiguo castillo permanecen algunos restos. Se observan composiciones de diferentes épocas, como los tres torreones pertenecientes a la muralla árabe del siglo X; dos balconadas que pertenecían a la residencia de los González de Sepúlveda -edificio del siglo XVI donde nació el escritor Don Francisco de Cossío- o la espadaña situada en el torreón central y formada por dos campanas, una de las cuales toca cada día el tradicional ‘Toque de Queda’, -33 campanadas que antaño comunicaban el cierre de las puertas de la muralla y que conectan el presente de Sepúlveda con aquellos siglos pasados-.
El esplendor de Sepúlveda en la Edad Media dio como resultado un total de 15 iglesias. De las tres que se construyeron extramuros, sólo se conserva la de San Bartolomé, de estilo románico y levantada entre los siglos XI y XII. Ya tras las puertas de la muralla se ubican la Iglesia de El Salvador, claro paradigma del románico castellano y considerada la edificación de estilo románico más antigua de la provincia; la Iglesia de la Virgen de la Peña y otros dos templos de gran interés, debido a lo que esconden en su interior: el Museo de los Fueros, integrado en la Iglesia de los Santos Justo y Pastor, y la Casa del Parque Natural de las Hoces del Río Duratón, en la de Santiago.
El patrimonio más significativo de la villa se aloja en el Museo de los Fueros, cuyo recorrido está formado por diversos capítulos. Otra de las visitas obligadas de Sepúlveda es su cárcel. El edificio, de unos 400 metros cuadrados, acoge una exposición permanente que muestra el uso y las formas de vida en este tipo de prisiones, con sus implicaciones sociales e históricas. El visitante experimentará y conocerá también cómo vivían los presos, cómo se impartía justicia y las costumbres y usos sociales relacionados de siglos pasados. Para captar la atención de los niños se han creado juegos pedagógicos, puzles de prismas con mensajes positivos sobre la libertad y un juego multimedia que les desafía a fugarse.
A todo ello se suma el Museo de Figuras de Juguete Antiguas -reúne más de 14.000 unidades, producidas en 44 países por más de 320 fabricantes- y la ya mencionada Casa del Parque Natural de las Hoces del Río Duratón, clave para conocer la formación de este extraordinario paisaje.