Han llegado a Zamora los familiares y descendientes del brigadista internacional sueco, Conny Andersson, para visitar el museo de Baltasar Lobo y conocer de cerca la obra del escultor zamorano, que fue muy activo en el campo de la memoria republicana, de la justicia social y amigo personal del brigadista.
Es la primera vez que llega a España una delegación tan numerosa de familiares de un brigadista, integrada por 31 personas, y también la primera vez que se produce una visita de estas características para conocer la figura y la obra de Baltasar Lobo, por lo que han sido acogidos en el Ayuntamiento con el calor y el respeto debido por el alcalde y diversos concejales del grupo municipal de Izquierda Unida.
Tras darles la bienvenida e invitarles a conocer detenidamente nuestra ciudad, Francisco Guarido, destacó la labor artística y la calidad de la obra de escultor, pero también hizo un reconocimiento expreso de su compromiso social y político de la persona de Baltasar Lobo con quien, dijo, Zamora sigue teniendo todavía una deuda, ya que la sala que alberga una parte de la colección artística no es la que se merece su obra. No obstante recordó que el museo se ubicará en el edificio del Ayuntamiento Viejo -que no es el lugar inicialmente previsto del Castillo, pero es un edificio adecuado y céntrico-,una vez que se produzca el traslado de la Policía Municipal al edificio del antiguo Banco de España.
También el concejal Christoph Strieder recordó la época de la guerra civil cuando tuvo su relación con las Brigadas Internacionales y el exilio que vivió el escultor, incluida su estancia en un campo de concentración, que está debidamente reflejada en la publicación editada por la Concejalía de Turismo sobre el Museo Baltasar Lobo. Por su parte el concejal Miguel Angel Viñas manifestó el agradecido a los brigadistas voluntarios que lucharon por las libertades en nuestro país y «aunque es cierto que perdieron la guerra, ganaron la lucha de la libertad de la que hoy afortunadamente disfrutamos»
El viaje ha sido promovido por la hija del brigadista, Britten, que ha querido traer a sus hijos, nietos y otros familiares para conocer los lugares que fueron tan significativos para su antepasado como brigadista internacional en España. Cuentan también con la colaboración de la Asociación de Amigos de los Brigadistas Internacionales y de la Asociación para la Memoria Histórica y en este viaje a Zamora les acompaña también la sobrina del escultor zamorano, Carmen Caballero.
- Fuente y más info: www.zamora.es