Elige uno de los destinos más románticos del mundo y haz que tus vacaciones acaben con una petición de mano inolvidable
Si eres de las que desde pequeña soñó con casarse de blanco después de que tu príncipe te pidiese en matrimonio de una manera única e irrepetible, pero tu pareja se resiste a dar el paso, aprovecha las vacaciones de verano para llevarle a uno de los destinos más románticos del mundo y que las flechas de Cupido hagan diana en su corazón.
Si optáis por visitar la República Checa tendrás muchas oportunidades para que se produzca la tan ansiada pregunta: “¿te quieres casar conmigo?” Aquí te dejamos algunas ideas que te ayudarán a conseguirlo.
Alojaros en un auténtico palacio
A poca distancia de la famosa capital Praga, en Bohemia Central, podéis alojaros en auténticos palacios que os permitirán protagonizar un romántico cuento de hadas en el que tu pareja se dará cuenta de que tú eres la princesa que siempre había buscado. Podéis optar por el lujoso Chateau Mcely, el pintoresco palacio Jemniště o el palacio Loučeň, cuyo parque esconde un original laberinto muy frecuentado por novios que deciden sellar allí su amor eterno.
Sellad para siempre vuestro amor con un candado
Praga es en sí una de las ciudades más románticas del mundo y esconde infinidad de rincones aptos para dar rienda suelta a las artes de Cúpido. La preciosa colina de Petřín con su réplica de la torre Eiffel, el puente de Carlos con su decoración de esculturas barrocas en el que las estatuas de San Juan Nepomuceno y de Santa Ana, patrona de la familia y de los niños, bendecirán vuestra unión, o la famosa isla Kampa, desde la que sale un puentecito que se ha convertido en el símbolo de las parejas enamoradas. Allí podréis colocar un candado con el que sellaréis vuestro amor y arrojaréis la llave al agua para que éste dure para siempre.
Dejaros seducir por un paisaje idílico y una copa de vino
El buen vino suele estar siempre presente en las escenas de amor. Y en la República Checa, sobre todo en la región de Moravia, abundan los caldos de calidad. Si sois deportistas elegid un paseo en bicicleta por la cautivadora Área de Lednice-Valtice, cuyos paisajes son indescriptibles, o bien haced una ruta por la zona vinícola de Pálava. Acabad el periplo ascendiendo al Monte Sacro de Mikulov (Svatý kopeček u Mikulova), cuyas espléndidas vistas panorámicas han inspirado a muchos a la hora de pedir el “sí, quiero”.
Relajaros en un balneario de época
En algunas ocasiones lo que nos echa atrás a la hora de tomar decisiones importantes como la de pedir matrimonio es el estrés laboral y la rutina diaria, así que una de las mejores maneras para superar ese obstáculo es apostar por la relajación. Y si por algo es conocida la República Checa es por la gran cantidad de fuentes naturales que abundan en todo el país, entorno a las cuáles se erigen preciosos balnearios de época. Aunque hay muchos donde elegir os recomendamos el mundialmente conocido balneario de Karlovy Vary, los baños de Jeseník, ubicados en medio de un precioso bosque, o el de Luhačovice, que destaca por su excepcional arquitectura modernista.
Viajad al pasado y convertiros por un día en miembros de la aristocracia
Después de Praga la ciudad checa más romántica es, seguramente, Český Krumlov. Se trata de un enclave mágico en el que el tiempo parece no haber transcurrido y todo nos recuerda al pasado aristócratico de este país que formó parte del Imperio Austro-Húngaro. Allí podréis vagar por sus callejuelas serpenteantes, escuchar una ópera en su original teatro con auditorio giratorio o visitar palacios tan bonitos como el de Hluboká nad Vltavou o el de Červená Lhota, cuyo lago constituye un lugar ideal para protagonizar una original pedida de mano.
Inspiraros en una de las iglesias más bonitas de Europa
Muchas parejas reconocen que fue la visita a una iglesia la que les hizo plantearse el matrimonio. Si quieres probar esta vía llévale a la hermosa colina Zelená hora, conocida como la Montaña Verde, y dejaros sorprender por la magia de la iglesia de peregrinación de San Juan Nepomuceno. Esta obra original, inscrita desde el año 1994 en el Patrimonio de la UNESCO, destaca por tener forma de estrella de cinco puntas y por el juego de luces y sombras que propician sus ventanales y su particular arquitectura, obra del gran arquitecto Jan Blažej Santini.
Buscad a Cúpido bajo una espectacular puesta de sol
Pero si hay un escenario romántico por excelencia, y del que no puede prescindir ninguna película de amor, es una puesta del sol. Si eso es lo que crees que puede servir para que tu pareja te pida en matrimonio, en la República Checa tienes dónde elegir. En plena naturaleza, sentados sobre escarpadas rocas como las de České Švýcarsko, conocida como la Suiza checa, o las de Adršpach-Teplice (Adršpašsko-teplické skály), o subidos a un barco y surcando con él los pequeños lagos azules que jalonan algunas de las ciudades encantadas checas.
Mas info: www.czechtourism.com
