La candidatura transcurre por 25 ayuntamientos y abarca, además de las propias rutas del Norte que pasan por nuestra tierra, el Camino de la Costa y el Camino Primitivo, el reconocimiento e inclusión singular de cuatro bienes gallegos: la Muralla y la Catedral de Lugo, la Basílica de Mondoñedo y el Monasterio de Sobrado. La Comunidad está desde hoy representada en la lista con un total de cinco bienes Patrimonio de la Humanidad. Las rutas del Norte fueron promovidas conjuntamente por los gobiernos de Asturias, Galicia, Cantabria, País Vasco y La Rioja, así como por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte.
Fotografía: TURGALICIA
En el World Conference Center de Bonn, en el marco de la 39ª sesión del Comité del Patrimonio Mundial, los Caminos del Norte acaban de ser incluidos en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. El conselleiro de Cultura, Educación y Ordenación Universitaria, Román Rodríguez, valoró como “trascendente para el desarrollo cultural y económico de Galicia” este nuevo galardón “que sitúa a nuestro país con cinco bienes patrimonio de la humanidad” y a España con 45 bienes inscritos en la Lista de Patrimonio Mundial. El tercer país con más bienes declarados sólo por detrás de Italia y China.
La inserción en la Lista de la UNESCO es el máximo reconocimiento que puede recibir un bien, por el cual el consejero de Cultura, Educación y
Ordenación Universitaria, Román Rodríguez expresó su satisfacción, subrayando “el trabajo realizado durante estos más de siete años de colaboración entre las administraciones de los gobiernos autonómicos de Asturias, Cantabria, País Vasco, La Rioja y Galicia, y el Ministerio de Educación, Cultura *y Deporte.”
“Un reconocimiento –continuó el conselleiro− del ‘Valor Universal Excepcional’ de cuatro rutas singulares: el Camino de la Costa, el Camino Primitivo, el Lebaniego (Cantabria) y el Vasco-Riojano, que abarca la inclusión nominal de un total de dieciséis monumentos de la máxima relevancia y valor cultural. Un reconocimiento de estas rutas del Norte que conducen a Compostela desde el siglo IX hasta el presente. Un reconocimiento de un bien vivo, importante para el desarrollo sostenible de las comunidades del Norte de España y, muy especialmente, de Galicia.”
En esta línea, el titular de Cultura y Educación de la Xunta destacó “la singular trascendencia para la Galicia interior y concretamente para Lugo, por la importancia que la declaración tiene como recurso para el desarrollo, además de cultural y patrimonial, económico y turístico.”
Los Caminos del Norte en Galicia
En concreto por Galicia transitan dos de las cuatro rutas: el Camino de la Costa, que comunica la cornisa Cantábrica con Compostela, y el Camino Primitivo. Además, abarca singularmente cuatro monumentos: la Muralla y la Catedral lucenses, la Catedral mindoniense y el Monasterio de Sobrado dos Monxes.
El Camino del Norte, procedente de Asturias, tiene dos variantes, la conocida como ruta de la Costa y la ruta del Interior, que es la que se corresponde con el Camino Primitivo o Camino de Ovedo. El trazado de este camino, a su paso por Galicia, discurre por un total de 9 ayuntamientos: A Fonsagrada, Vacía, Castroverde, Lugo, Guntín, Friol, Palas de Rei, Toques y Melide, donde finalmente entronca con la ruta principal del Camino de Santiago: el Camino Francés.
Por su parte, el Camino de la Costa discurre por un total de 16 ayuntamientos, en concreto hablamos de Ribadeo, Barreiros, Trabada, Lourenzá, Mondoñedo, Abadín, Vilalba, Guitiriz, Begonte, Friol, Sobrado, Vilasantar, Boimorto, Arzúa, O Pino y Santiago de Compostela, donde entronca con el Camino Francés a la altura de la cabecera del aeropuerto de Lavacolla.
Galicia incrementa así su nómina de declaraciones, que hasta el día de hoy incluía ya a la Ciudad vieja de Santiago de Compostela, elegida en 1985; el Camino de Santiago Francés, inscrito en 1993; la Muralla romana de Lugo reconocida en el 2000; y la torre de Hércules, que alcanzó su inclusión en 2009.
El final de un largo recorrido
El proceso ante la UNESCO comenzó con la inclusión de los Caminos del Norte en la Lista indicativa nacional en el año 2007. A partir de aquí dichas comunidades de Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco y La Rioja, así como el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, elaboraron conjuntamente la candidatura, que abarca, entre otros aspectos, la redacción de un expediente exhaustivo, los procesos de delimitación y protección y el sometimiento a diversos informes y supervisiones tanto de la propia UNESCO como del ICOMOS como principal órgano asesor técnico en esta materia, algunos con visitas in situ.
Este expediente de declaración requirió de una serie de trabajos específicos, exhaustivos y completos basados en consideraciones de carácter técnico y formal muy estrictas. Entre ellos, uno de los de mayor relevancia es su propia documentación histórica y el de la identificación de bienes asociados representativos de su valor universal y que completan la singularidad del expediente.
Por su parte, cada comunidad autónoma desarrolló sus propios procesos de protección de los Caminos del Norte. En Galicia, las diferentes rutas jacobeas tienen un régimen particular derivado de la Ley 3/1996, de Protección de los Caminos de Santiago, en la que ya se reconocían los itinerarios del Norte; sin embargo, el proceso no se completó hasta que se delimitaron sus trazados y la extensión de su territorio histórico.
Delimitación y evaluación
En este sentido, el decreto 267/2012, por lo que se aprueba la delimitación del Camino de Santiago del Norte y el decreto 158/2014, por lo que se aprueba la delimitación del Camino de Santiago del Norte, Ruta de la Costa, identifican la aplicación de criterios homogéneos y sistemáticos que pretenden sintetizar tanto el conocimiento histórico, el valor inmaterial, la encuesta etnográfica, la lectura especializada en el territorio, las infraestructuras y el régimen de propiedad de la tierra para lo bien que ahora se propone como Patrimonio de la Humanidad.
Finalmente, en septiembre de 2014 tuvo lugar a misión de evaluación de dos técnicos del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios Histórico-Artísticos (ICOMOS), órgano asesor de la UNESCO. Los evaluadores recorrieron 1.500 km. de rutas y conocieron, uno a uno, los 16 lugares vinculados al Camino de Santiago del Norte propuestos para su inscripción en la Lista del Patrimonio Mundial. En noviembre y diciembre de 2014, el ICOMOS requirió información complementaria y en el mes de mayo se realizó la evaluación final, recomendándose la inclusión en la Lista del Patrimonio Mundial de los caminos del norte.
La declaración por parte del Comité del Patrimonio Mundial en Bonn supone la última etapa de un proceso que comenzó hace siete años y con el que la Xunta de Galicia estuvo comprometido desde el primer momento.
Afonso II, el primer peregrino
Las primeras peregrinaciones hacia la Santiago de Compostela están relacionadas con el momento histórico del descubrimiento de la tumba de Santiago el Mayor, en los primeros años del siglo IX, y continúan ininterrumpidamente durante los siglos posteriores. Se trata de peregrinaciones relacionadas al culto del Salvador en Oviedo y que cuentan con romeros ilustres como Afonso II, ‘El Casto’, rey al que la leyenda sitúa como primer peregrino en el Camino para visitar la recientemente hallada tumba apostólica y al que se le atribuye la construcción de una primera iglesia dedicada al culto jacobeo.
Estas romerías cuentan con una reconocida vitalidad hasta el siglo XVIII. Los peregrinos llegaban desde Francia, o a través de los puertos vascos y cántabros de países y regiones del Atlántico (Inglaterra, Flandes, Alemania o Escandinavia), que seguían los trazados de las rutas del norte del Camino de Santiago.
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