Quizás, en algún momento del último viaje que hicimos a León, hayamos pasado por al lado del edificio… sin enterarnos de que, ese edificio ruinoso del que se conserva poco más que la fachada, es lugar cargado de Historia: es el, llamado, palacio de Alfonso VII y Doña Berenguela – esposa del rey leonés Don Alfonso IX-, uno de los escasos edificios de románico civil que se conservan… incluso contando con los que nos han llegado en un estado tan ruinoso como éste.
Fotografía: Martínezld
Situado en el interior del patio del colegio de las Teresianas, nos tendremos que conformar con contemplar el edificio a través de una verja (a no ser que consigamos el permiso de las monjas para entrar),
Edificio de tres alturas, construido en el siglo XIII, del que se conservan, a nivel de fachada, dos de los pisos y el arranque del tercero, su asociación con Alfonso VII y Doña Berenguela tienen más que ver con la imaginación popular que con la Historia, puesto que, lo más probable es que el palacio románico perteneciera a alguna familia patricia de la ciudad… aunque algunos historiadores también apuntan la
Fotografía: Martinezld
posibilidad de que la denominación se deba a que Doña Sancha, hermana del rey, prepara, aquí, su tálamo nupcial.
Los restos del Palacio
Los restos del palacio imperial son románicos, con una planta de unos cuarenta metros cuadrados, muros de más de un metro de espesor, aparejo de canto rodado y argamasa y recuadros de piedra sillería.
Conserva dos plantas unidas por escalera de caracol. Hay arcos de medio punto y otros protogóticos, ventanas románicas del siglo XIII con puertas góticas de salida a galerías. Es una joya de arte y en el año 1980 quedó totalmente restaurado y digno de admiración.
Toda esta obra debió comprender también la portada gótica del siglo XIII que se conserva en la esquina de la calle misma de San Pelayo.
Fuente y más info:
http://www.saber.es/web/biblioteca/libros/castillos-de-leon/html/t14.htm
