El origen de esta población se remonta a finales del siglo IX y principios del X. Tras la batalla cristiana de la batalla de «Polvoraria o Polvorosa» (878), junto al río Órbigo, la monarquía asturleonesa emprende una ambiciosa repoblación y puesta en cultivo del espacio, con la participación tanto pública como privada.
Hacia el año 1157, Castrogonzalo se vio involucrado directamente en los enfrentamientos derivados de la guerra entre Alfonso IX de León y Alfonso VII de Castilla. Igualmente, su castillo pasa a ser moneda de cambio en los tratados de paz.
Tras la llegada de los Pimentel a Benavente en 1398, Castrogonzalo pasa a convertirse en un enclave destacado del condado, tal como se pone de manifiesto en los libros de contaduría de la familia.
Los acontecimientos relacionados con la Guerra de Independencia son, sin duda, otro de los momentos culminantes dentro de la dilatada historia de Castrogonzalo. El paso del ejército francés provoca un grave deterioro en el patrimonio histórico artístico de la localidad.
Fotografía: www.ayuntamientodecastrogonzalo.es
En el capítulo de monumentos, destaca la iglesia de Santo Tomás, que conserva un magnífico retablo del siglo XVI que cuenta con varias tablas pintadas por distintos maestros de la escuela de Toro.
La villa de Castrogonzalo cuenta con unos importantes recursos turísticos, que han supuesto un incremento importante del número de habitantes en los últimos años.
Castrogonzalo extiende su caserío entre dos laderas para unirse en una hondonada en el centro de la población, formando el barrio de Arriba, coronado por la Iglesia de San Miguel, que se asienta sobre un altozano y el barrio de Abajo, que formaba la desaparecida Iglesia de Santo Tomás, que constituye la parte más llana y espaciosa del pueblo y donde tradicionalmente se han ubicado los edificios públicos y las casas más nobles.
Fotografía: www.ayuntamientodecastrogonzalo.es
La iglesia que se conserva titulada de San Miguel se encuentra en lo más alto de la localidad. Su edificio es sólido, siendo sus paredes hasta la mitad de su altura de piedra de sillería y el resto de ladrillo, si bien en el exterior sus muros están enfoscados y encalados, simulando uniformidad en la construcción. Aunque parte de su fábrica parece datar del siglo XVI, en los siglos siguientes debieron de realizarse importantes reformas. El templo consta de una única nave y está abovedado. Alberga un altar mayor y dos colaterales que son propios u originales del templo, ya que hace algunos años y debido al derribo de la Iglesia de Santo Tomás, hubo de trasladarse su retablo mayor a ésta de San Miguel (data de mediados del siglo XVI). El templo alberga también un gran crucifijo del siglo XIV.
Celebra fiestas el 17 de enero (San Antón) y el 16 de agosto (San Roque).
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Los murales de Parsec!Hunter: Un pueblo de 500 habitantes inundado de arte urbano
Fotografía: www.yorokobu.es/parsec-castrogonzalo
¿Quién dijo que un pueblo de 500 habitantes no puede ser un punto de visita obligado para los amantes del Street Art? Castrogonzalo, por si alguien se ha despistado, lo es para gran orgullo de sus habitantes.
Castrogonzalo es un municipio de 517 habitantes, según el INE de 2009, situado en la comarca de Benavente y Los Valles (Zamora).
Parece un pueblo absolutamente normal, con sus dos bares (el de arriba y el de abajo), su iglesia, su plaza y el agradable silencio que proyectan las grandes extensiones de campos amarillos. Sin embargo no es un pueblo normal.
Fotografía: www.yorokobu.es/parsec-castrogonzalo
Caminar por sus calles es una sorpresa constante y toda una experiencia artística: perfectamente integrados, en sus muros aparecen y desaparecen modernos dibujos y murales que, al igual que sus viejas casas, forman ya parte de la identidad cultural del municipio.
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