Versión clásica

El Museo Nacional del Prado incorpora una obra de gran importancia para su colección encargada por los Archiduques Alberto de Austria e Isabel Clara Eugenia

Adquirida por el Ministerio de Cultura para su depósito en el Prado. La procesión de gigantes en Bruselas el 31 de mayo de 1615 es una obra monumental realizada en 1616 por David Noveliers, que trabajó para la corte de los Archiduques en Bruselas. La incorporación de este cuadro a la colección del Prado tiene un significado especialmente enriquecedor porque forma parte de una serie de ocho grandes lienzos.

Museo Nacional del Prado

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Museo Nacional del Prado, 24 de octubre de 2024. El Ministerio de Cultura ha adquirido con destino al Museo Nacional del Prado, La procesión de gigantes en Bruselas el 31 de mayo de 1615, una obra de David Noveliers que forma parte de una serie de ocho grandes lienzos que conmemoran un evento sucedido en Bruselas en 1615: la Infanta Isabel Clara Eugenia, hija de Felipe II, que gobernaba los Países Bajos meridionales como Princesa Soberana junto a su esposo el Archiduque Alberto de Austria, participó en el campeonato anual de tiro del Grand Serment (o gremio de los Ballesteros) y logró abatir el pájaro («el papagayo»), colocado sobre la aguja de la torre de la iglesia de Nuestra Señora de Sablón. Se sucedieron durante varios días las celebraciones y para conmemorar estos acontecimientos, los Archiduques Alberto de Austria e Isabel Clara Eugenia, que se encontraban entre los mecenas más destacados de Europa en su tiempo, encargaron ocho cuadros a varios de sus pintores de corte, entre ellos, Denijs van Alsloot y David Noveliers.

Estas escenas recrean acontecimientos históricos de gran interés que celebraban a la Infanta Isabel Clara Eugenia, y a través de ella a la Monarquía española en los Países Bajos. Se trata de obras monumentales y de gran valor artístico e incluso antropológico, por los temas representados, realizadas por pintores de una de las cortes más relevantes para el coleccionismo de pintura en Europa a principios del siglo XVII. La existencia de otras versiones tempranas de esta serie muestra de la importancia que tuvieron desde el momento de su realización.

El grupo completo de ocho cuadros fue enviado a España por los Archiduques al Rey Felipe III, hermano de la infanta, y en el inventario del Alcázar de Madrid en 1636 se describen cada una de las escenas, incluyendo la que narra esta obra: “El cuarto, de doce pies de largo y el mismo alto [que el cuadro anterior], en que están los cuatro gigantones y cuatro gigantillos que sacaron en esta fiesta, y hay una figura de un caballo muy grande encubertado de negro y encima cuatro hombres armados con sus espadas desnudas y en la ducha cubierta tres escudos de armas.”

De estas ocho obras, solo se conservan seis pinturas. Dos pertenecen al Victoria and Albert Museo de Londres y, con la interesante incorporación de La procesión de gigantes en Bruselas el 31 de mayo de 1615 de David Noveliers, son ya cuatro las que se encuentran en el Prado: Fiestas del Ommegang en Bruselas: procesión de gremios; Fiestas del Ommegang en Bruselas: procesión de Nuestra Señora de Sablón; Fiesta de Nuestra Señora del Bosque, todas ellas de Denis van Alsloot,

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